16 junio, 2024

Un sexenio señalado de censura al periodismo que mete su cuchara más allá de donde quiere el gobierno que se sepa, donde hablar de la política mexicana es un riesgo, trajo la publicación de un nuevo libro que exhibe la corrupción de la política mexicana y que ha encendido el debate entre las principales figuras presidenciales, Claudia Sheinbaum y Xóchitl Gálvez.

 

La obra, presentada por la periodista Anabel Hernández, titulada “La historia secreta: AMLO y el Cártel de Sinaloa”, ha desencadenado una serie de reacciones que trascienden el ámbito literario para adentrarse en el corazón de la política nacional.

 

La autora de diferentes títulos (incluso todos señalando a los gobiernos en turno) exhibe el supuesto vínculo entre el cártel de Sinaloa y la campaña del actual Presidente de la República.

  • 2005 La familia presidencial.
  • 2006 Fin de fiesta en Los Pinos.
  • 2008 Que el Presidente frene la represión.
  • 2008 Los cómplices del presidente.
  • 2010 Los señores del narco.
  • 2012 México en llamas. El legado de Calderón.
  • 2016 La verdadera noche de Iguala. …
  • 2016 La ira de México: Siete voces contra la impunidad.

 

Durante cuatro años, Anabel Hernández se dedicó a compilar una variedad de testimonios y documentos judiciales que detallan supuestas interacciones entre el actual presidente Andrés Manuel López Obrador y el Cártel de Sinaloa, sugiriendo que el presidente buscó activamente establecer vínculos con miembros de este grupo delictivo.

 

Este trabajo de investigación ha culminado en un libro que Hernández describe no solo como un relato de eventos pasados sino como una advertencia sobre el futuro político de México.

 

En su momento la jornada de presentación del libro no estuvo exenta de controversia. Hernández expuso audios inéditos que reforzarían las alegaciones presentadas en su libro. Además, reveló que la publicidad de su libro había sido objeto de censura, lo que la llevó a afirmar que nunca había experimentado una medida similar en sus anteriores publicaciones.

 

La candidata del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Claudia Sheinbaum, ha respondido a estos señalamientos calificando el libro de Hernández como una pieza de ficción más adecuada para entretener que para informar. Sheinbaum argumenta que las acusaciones contenidas en el libro son parte de una estrategia para desacreditar al actual gobierno y sus afiliados, incluida ella, especialmente en un momento tan crítico como el periodo electoral.

 

Por su parte, Xóchitl Gálvez, rival de Sheinbaum y candidata de la coalición PAN, PRI, y PRD, ha aprovechado la publicación para intensificar sus ataques, utilizando términos como “narcocandidata” y “narcopartido” para referirse a Sheinbaum y Morena, respectivamente. Este enfoque ha sido criticado por figuras como Leo Zuckermann, quien ha calificado estos ataques de innecesarios y potencialmente dañinos para el proceso democrático.

 

La periodista Anabel Hernández y el grupo editorial Penguin Random House denunciaron actos de censura al buscar publicitar el nuevo libro “La Historia Secreta: AMLO y el Cartel de Sinaloa”.  “Nunca jamás en la historia que he escrito libros incómodos, jamás había sufrido una censura de esta magnitud”, declaró Anabel Hernández ante medios.

 

Mientras tanto, la reacción del presidente López Obrador no se ha hecho esperar. A través de diversas plataformas, ha desestimado las acusaciones, insistiendo en que su administración sigue siendo un bastión de la democracia, como demostraron eventos recientes como la marcha de la “Marea Rosa” y el tercer debate presidencial.

 

La publicación de “La historia secreta” ha vuelto a poner en el foco la persistente cuestión de la corrupción y la influencia del crimen organizado en la política mexicana. La obra de Hernández, al igual que su recepción, refleja la polarización y la intensidad de las pasiones políticas en México, particularmente en un año electoral. Esta situación subraya el desafío constante de discernir la realidad en medio de acusaciones cruzadas, intereses políticos y la lucha por la credibilidad en la arena pública.

 

A medida que se acercan las elecciones, el impacto de tales publicaciones y las discusiones que generan probablemente influirán en la percepción pública de los candidatos y sus plataformas. La tarea de los votantes será sopesar cuidadosamente la información disponible, diferenciando entre acusaciones fundamentadas y tácticas de desinformación, para tomar decisiones informadas que determinarán el futuro del país.