El movimiento antirreforma al Poder Judicial de la Federación (PJF) ha puesto la mirada sobre 43 senadores del PAN, PRI y Movimiento Ciudadano, quienes jugarán un papel clave en la discusión de la controvertida reforma judicial. Magistrados, jueces y trabajadores del PJF han intensificado sus protestas, buscando frenar la iniciativa impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, que en los próximos días será debatida en el Senado.
Con una megamarcha anunciada para mañana, los trabajadores del PJF buscan aumentar la presión sobre los legisladores. Ayer, más de 300 empleados de la Suprema Corte y tribunales locales marcharon desde la Bolsa Mexicana de Valores hasta el Senado, coreando consignas como: “¡juez votado, peso devaluado!” y “¡si pasa la reforma, se cae la bolsa!”. Los manifestantes denuncian que la aprobación de la reforma podría comprometer la independencia del Poder Judicial y afectar negativamente la economía del país.
Lucero de Alba Peña, jueza de Distrito en Tlaxcala, hizo un llamado directo a los senadores de oposición, instándolos a votar en contra de la reforma. “A los 43 senadores tienen todo nuestro respaldo. Esta es una oportunidad para defender la democracia y la justicia en México”, declaró la jueza en uno de los mítines organizados en las inmediaciones del Senado.
Los manifestantes también lanzaron advertencias a Morena y sus aliados, recordando que hoy son mayoría, pero mañana podrían estar en la oposición. En este contexto, los trabajadores del PJF anunciaron que no descartan bloqueos en la sede del Senado, a medida que la reforma se discuta en comisiones este domingo.
En un mensaje dirigido a los senadores oficialistas, José de Jesús Cruz Sibaja, trabajador de la Suprema Corte, los instó a reconsiderar su postura: “Sabemos que están bajo presión, pero tienen el poder de proteger la democracia. Debilitar al Poder Judicial es debilitar la credibilidad del país”.
Con la situación escalando, el movimiento antirreforma ha convocado nuevas movilizaciones, incluyendo una marcha que partirá del Ángel de la Independencia hacia el Senado. Mientras tanto, la presión sigue aumentando sobre los 43 senadores opositores, cuyo voto podría determinar el futuro del Poder Judicial en México.
