La Caravana Viacrucis Migrante ha retomado su marcha después de dos días de descanso en Hidalgo, con la meta de llegar a la Basílica de Guadalupe en la Ciudad de México. Los migrantes buscan bendecir una cruz de madera que han llevado durante todo su recorrido y prepararse para continuar hacia la frontera norte del país.
Este grupo de migrantes partió de Tapachula, Chiapas, el 24 de marzo, con un contingente inicial de alrededor de 3,000 personas; actualmente, el grupo se ha reducido a aproximadamente 600 personas, incluyendo muchas mujeres y niños.
El pasado fin de semana, la caravana se vio obligada a hacer una parada no planeada en Apan, Hidalgo, después de un altercado con el Instituto Nacional de Migración (INM) en Tlaxcala. Los migrantes decidieron replegarse a Apan para descansar y reorganizarse.
Tras dejar la estación de ferrocarril de Apan, la caravana continuó su camino por la carretera Apan-Calpulalpan, cruzando de nuevo hacia Tlaxcala al mediodía. Durante este trayecto, fueron acompañados por policías estatales de Hidalgo, autoridades municipales, la Guardia Nacional y el Ejército mexicano. Al ingresar a Tlaxcala, la policía de Calpulalpan tomó el relevo en la escolta de los migrantes, mientras las autoridades de Hidalgo se retiraban.
La caravana Viacrucis Migrante está compuesta en su mayoría por mujeres, niños y jóvenes. A pesar de los desafíos y los incidentes con el INM, los migrantes siguen adelante con su objetivo de llegar a la Ciudad de México y eventualmente, a la frontera norte del país.
El objetivo inmediato es llegar a la Basílica de Guadalupe, un lugar de gran importancia religiosa y cultural, donde planean realizar una ceremonia para bendecir la cruz de madera que los ha acompañado en su travesía. Esta escala no solo les dará un respiro físico, sino que también les brindará un momento de esperanza y fortaleza espiritual antes de continuar su difícil viaje.
La presencia de las fuerzas de seguridad, incluyendo la policía estatal, la Guardia Nacional y el Ejército, asegura que el grupo esté protegido en su trayecto; sin embargo, los migrantes siguen enfrentando numerosos desafíos mientras buscan un futuro mejor.
La Caravana Viacrucis Migrante simboliza la lucha y la esperanza de muchos centro y sudamericanos que buscan escapar de la violencia y la pobreza en sus países de origen. Su travesía por México es un recordatorio de las complejas realidades de la migración y la necesidad de soluciones humanitarias y políticas efectivas.
