Caty Monreal, excandidata de Morena, Partido Verde y Partido del Trabajo a la alcaldía Cuauhtémoc, ha dejado claro que no está dispuesta a rendirse tras el revés recibido por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) este 18 de septiembre. La hija del diputado Ricardo Monreal impugnará la decisión del TEPJF, que confirmó el triunfo de Alessandra Rojo de la Vega, candidata de la coalición PAN-PRI-PRD, luego de que previamente el Tribunal Electoral de la Ciudad de México (TECDMX) había anulado dicha elección.
Extraño es que tras las revelaciones de Luisa María Alcalde sobre el nepotismo del Poder Judicial, donde señala que varios funcionarios tienen familiares en puestos dentro del gobierno, no se observe con la misma crítica aquellos políticos de Morena que también buscan estos beneficios.
A través de sus redes sociales, Caty Monreal expresó su inconformidad y anunció que llevará su caso a la Sala Superior del TEPJF, insistiendo en que fue víctima de violencia política de género durante la campaña. “Lamento la decisión del TEPJF, definitivamente no usaron las gafas violetas. La sentencia emitida por el TECDMX es correcta. Como es mi derecho, impugnaré ante la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación”, escribió en su cuenta de X (anteriormente Twitter).
¿De qué se trata la controversia?
El origen de esta disputa se remonta a las elecciones del pasado 2 de junio, cuando Alessandra Rojo de la Vega resultó ganadora de la alcaldía Cuauhtémoc por un margen de 3.13% de votos sobre Caty Monreal. La diferencia de votos fue relativamente pequeña, lo que permitió que Morena presentara varios recursos legales para cuestionar los resultados.
Uno de los principales argumentos de Monreal y su equipo fue que Rojo de la Vega había cometido violencia política de género, al hacer comentarios despectivos y minimizar la trayectoria de Monreal durante la campaña. Además, la excandidata de Morena acusó a la ganadora de asociarla únicamente con su padre, el senador Ricardo Monreal, como parte de un ataque personal y familiar.
El Tribunal Electoral de la Ciudad de México validó estas acusaciones en su momento, anulando la elección y ordenando nuevas elecciones en la alcaldía Cuauhtémoc, sin embargo, Alessandra Rojo de la Vega impugnó esta decisión ante la Sala Regional del TEPJF, que finalmente falló a su favor este 18 de septiembre, revocando la nulidad de la elección.
El TEPJF, en su fallo, determinó que no se había acreditado la violencia política de género en las declaraciones de Rojo de la Vega contra Monreal. Los magistrados argumentaron que las críticas de Rojo de la Vega estaban amparadas bajo la libertad de expresión y no constituían un ataque basado en el género de la excandidata.
“De un análisis contextual de las publicaciones denunciadas no se observan expresiones con elementos de género en perjuicio de la denunciante sino manifestaciones amparadas bajo la libertad de expresión en materia política”, señaló el magistrado Luis Enrique Rivero Carrera, quien fue el ponente del caso.
Asimismo, el tribunal consideró que el hecho de que Rojo de la Vega no mencionara el nombre de Monreal en algunas entrevistas no era una estrategia para invisibilizarla como mujer, sino que podría ser parte de una estrategia publicitaria electoral.
El TEPJF también rechazó los otros recursos presentados por el equipo de Monreal, como la acusación de rebase en los gastos de campaña y la supuesta inequidad en la exposición mediática.
Reacción de Caty Monreal y sus próximos pasos
A pesar del fallo, Caty Monreal no parece dispuesta a aceptar la derrota. En sus redes sociales ha sido enfática en que continuará su lucha en los tribunales, argumentando que la Sala Regional del TEPJF no abordó el caso con la debida perspectiva de género.
Monreal también ha cuestionado la imparcialidad del fallo, al insinuar que Rojo de la Vega fue favorecida por su acceso a los medios de comunicación y su vínculo con la coalición PAN-PRI-PRD. Para Monreal, el proceso judicial aún no ha terminado y confía en que la Sala Superior del TEPJF revierta la decisión.
El equipo de Monreal ha interpuesto múltiples recursos desde que perdió las elecciones. Estos incluyen la solicitud de anulación de elecciones y el recuento total de votos, pero hasta ahora los tribunales no han encontrado pruebas suficientes para revocar el triunfo de Rojo de la Vega. El primer recurso resultó en un recuento parcial de las casillas, que confirmó el resultado a favor de Rojo de la Vega, mientras que las acusaciones de rebase de gastos de campaña fueron desestimadas por el Instituto Nacional Electoral (INE).
Contexto político y las implicaciones de la sentencia
La alcaldía Cuauhtémoc es una de las demarcaciones más importantes de la Ciudad de México, y su control tiene una gran relevancia política. La batalla por el control de esta alcaldía ha sido una de las más disputadas en las elecciones locales, con partidos y candidatos de todos los sectores compitiendo por el dominio de este territorio.
La resolución del TEPJF no solo confirma el triunfo de Alessandra Rojo de la Vega, sino que también marca un precedente sobre la interpretación de lo que constituye violencia política de género en el contexto electoral. Los magistrados del TEPJF dejaron claro que las declaraciones de campaña, aunque duras, no siempre pueden calificarse como violencia de género si están dentro de los límites de la libertad de expresión.
Este fallo también refleja la tensión que existe entre Morena y la oposición en la Ciudad de México. La alcaldía Cuauhtémoc es vista como un bastión estratégico y su control podría influir en futuras elecciones a nivel local y nacional. Es así que con la resolución del TEPJF, Alessandra Rojo de la Vega tiene luz verde para asumir la alcaldía Cuauhtémoc el próximo 1 de octubre, aunque esto podría complicarse si Caty Monreal logra que la Sala Superior del TEPJF admita su recurso de impugnación y emita una nueva sentencia.
Monreal confía en que el tribunal superior le dará la razón, mientras que Rojo de la Vega ya ha comenzado a preparar su equipo de trabajo para asumir el control de la alcaldía. El tiempo apremia, ya que la fecha de inicio de la nueva administración está a la vuelta de la esquina.
