
Programa ambienteal puente Nichupte
Gobierno de México a través de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) realiza el programa de remediación ambiental más importante en su historia, como parte del proceso de construcción del Puente Vehicular Nichupté en Cancún, Quintana Roo. Esta iniciativa contempla la recuperación de 306 hectáreas de manglar, con el objetivo de garantizar la sustentabilidad de la obra.
El proyecto cuenta con una Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) autorizada por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), en la que se establece la aplicación de 10 programas de conservación bajo el principio de “tasa cero” en pérdida de cobertura de mangle. La construcción abarca una superficie de apenas 4 hectáreas, lo que demuestra el enfoque técnico y ambientalmente responsable de la SICT.
Encabezada por Jesús Antonio Esteva Medina, la SICT reafirma su compromiso con el medio ambiente durante la ejecución de esta obra de infraestructura de 11.2 kilómetros, que cruzará la laguna Nichupté para conectar la zona hotelera de Cancún con el Boulevard Colosio y las avenidas Tulum, Kabah y Bonampak.
A través de un sistema de gestión ambiental adaptativo, se prevé prevenir, mitigar y compensar los impactos del proyecto, asegurando un equilibrio entre el desarrollo y la conservación.
Para cumplir con las medidas ambientales establecidas, la SICT y las empresas constructoras responsables del proyecto están ejecutando los siguientes 10 programas especializados:
- Supervisión y gestión ambiental
- Manejo integral de vegetación
- Manejo integral de fauna
- Manejo integral de residuos
- Monitoreo ambiental (subprogramas de avifauna y cocodrilos)
- Programa piloto para la recuperación de pastos marinos
- Rehabilitación y mejoramiento ambiental en zonas de manglar
- Programa de gestión social
- Programa de vigilancia ambiental externa
- Programa de seguridad y atención a contingencias ambientales en áreas de manglar
Uno de los ejemplos más representativos es la canalización en la zona norte, que abarca aproximadamente 75 hectáreas de manglar. Antes de intervenir el área, se llevó a cabo un estudio exhaustivo para identificar sus necesidades ecológicas. Como resultado, se determinó la apertura de canales para permitir la entrada de agua, lo que facilita la limpieza y posterior recuperación natural del ecosistema.
Además, se han implementado técnicas innovadoras para restaurar praderas marinas, logrando la recuperación de 108 hectáreas —59 en la zona norte y 49 en la zona centro— que antes se encontraban fragmentadas.
En materia de avifauna, el monitoreo ha permitido identificar 249 especies presentes en la laguna Nichupté, de las cuales 32 están catalogadas en algún estatus de protección conforme a la NOM-059-SEMARNAT-2010.
Asimismo, se han reubicado 954 individuos de fauna silvestre correspondientes a 42 especies, y 822 ejemplares de biota marina pertenecientes a 30 especies. En el caso específico del cocodrilo, se han registrado 1,627 avistamientos, con una población estimada de 74 ejemplares.
Por otro lado, se realizó un estudio de hidrodinámica del sistema lagunar Nichupté para identificar zonas estratégicas donde restablecer el flujo hidrológico mediante la apertura de canales, favoreciendo así la rehabilitación de manglares degradados.
El Puente Nichupté será una infraestructura moderna que no solo convivirá armónicamente con la naturaleza, sino que también brindará una vía alterna de evacuación para la zona hotelera ante emergencias o desastres naturales.