Claudia Sheinbaum, candidata de la coalición Sigamos Haciendo Historia, se ha consolidado como la líder indiscutible en el reciente debate presidencial, según revelan los datos de la última encuesta realizada por Mendoza Blanco y Asociados (MEBA). Con el 54.4% de los espectadores respaldando su desempeño, Sheinbaum no solo ha demostrado su habilidad retórica, sino también la solidez de sus propuestas para dirigir el futuro de México.
El evento, que también contó con la participación de Xóchitl Gálvez Ruiz de Fuerza y Corazón por México y Jorge Álvarez Máynez de Movimiento Ciudadano, fue un campo de batalla de ideas y proyectos en el que Sheinbaum logró destacarse por su claridad y enfoque. Según los datos, Gálvez logró capturar el 36.8% de la aprobación del público, mientras que Máynez se quedó con solo el 7.5%.
Inmediatamente después del debate, los seguidores de Morena y sus partidos aliados, el Partido del Trabajo y el Verde, se reunieron en los Estudios Churubusco para celebrar la victoria declarada. Los cánticos de “Ganamos el debate” resonaron en la zona, evidenciando el alto espíritu y la confianza del equipo de Sheinbaum.
El apoyo no se limitó a las calles; en las redes sociales, el nombre de Sheinbaum fue tendencia, dominando las conversaciones con un alto volumen de menciones y comentarios positivos. Según datos de seguimiento en línea, Sheinbaum generó más interacciones en Google que sus contrincantes durante y después del debate, lo que demuestra un claro interés y aprobación por parte de la audiencia digital.
La encuesta de MEBA también destacó que un 26.4% de los televidentes admitió que el debate podría influir en su decisión de voto. De estos, muchos señalaron a Sheinbaum como la razón principal para reconsiderar su voto inicial, lo que podría traducirse en un cambio significativo en las preferencias electorales a medida que nos acercamos a las elecciones.
A poco más de un mes para los comicios, Sheinbaum lidera la intención de voto con un 58%, según la ‘encuesta de encuestas’ de Oraculus. Gálvez sigue con un 35%, mostrando un aumento ligero pero insuficiente para cerrar la brecha significativa con la líder. Máynez, por su parte, mantiene un modesto 8%.
Este triunfo en el debate refuerza la imagen de Sheinbaum como una candidata capaz y preparada, que no solo comprende los retos que enfrenta el país, sino que también posee las propuestas concretas para abordarlos.
En contraste, sus competidores enfrentan el desafío de redefinir sus estrategias y fortalecer sus campañas para conectar más efectivamente con los votantes. La presión es especialmente intensa para Gálvez, quien necesita ampliar su alcance y convencer a aquellos aún indecisos de que es una alternativa viable.
A medida que la campaña avanza, será fundamental para todos los candidatos intensificar sus esfuerzos y refinar sus mensajes. Para Sheinbaum, el objetivo será mantener el impulso ganado y seguir profundizando en el diálogo con los ciudadanos para asegurar no solo una victoria electoral, sino también una transición suave y un mandato exitoso.
