El Parque Nacional de los Lençóis Maranhenses, famoso por sus interminables dunas y deslumbrantes piscinas naturales en el noreste de Brasil, ha sido declarado Patrimonio Mundial por la Unesco. Esta decisión se tomó durante la 46ª reunión anual del Comité del Patrimonio Mundial de Naciones Unidas, celebrada en Nueva Delhi, India, donde se evaluaron 28 sitios de todo el mundo para su reconocimiento.
Ubicado en la costa este del estado de Maranhão, en una zona de transición entre los biomas de la Amazonia, Cerrado y Caatinga, el Parque Nacional de los Lençóis Maranhenses (PNLM) se convierte en el 24º sitio brasileño incluido en esta prestigiosa lista.
El PNLM, creado en junio de 1981, abarca un área de 156 mil hectáreas, de las cuales 90 mil están compuestas por dunas libres y lagunas interdunares. Estas lagunas, que pueden ser de color azul o verde, atraen a más de 100 mil turistas cada año. Según la Unesco, es el mayor campo de dunas de Sudamérica. Durante la transición entre las temporadas de lluvia y seca, se forman deslumbrantes piscinas naturales de agua dulce entre los montículos de arena blanca.
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, destacó en una carta enviada a la Unesco a principios de 2023 que los Lençóis Maranhenses son un área protegida “donde el desierto y el mar se encuentran, creando un paisaje único“. Considerado uno de los parajes más bellos de Brasil, el parque abarca los municipios de Barreirinhas, Santo Amaro y Primeira Cruz, y colinda con el océano Atlántico. Además de su impresionante paisaje, el parque es un refugio para aves migratorias y animales amenazados, como el pájaro guará (ibis escarlata), el lobito de río, el tigrillo y el manatí.
El Comité del Patrimonio Mundial, compuesto por representantes de 21 Estados, ha inscrito más de mil 200 sitios de al menos 168 países en su lista desde su creación. La inclusión del Parque Nacional de los Lençóis Maranhenses en esta lista subraya su importancia como un tesoro natural y cultural para la humanidad.
