28 junio, 2024

El Instituto Nacional Electoral (INE) anunció que fiscalizará la Marea Rosa, un evento masivo realizado en el Zócalo de la Ciudad de México, que congregó a cerca de 100,000 personas. Esta decisión responde a la participación activa de Xóchitl Gálvez, candidata presidencial de la alianza conformada por el PAN, PRI y PRD, en lo que fue una clara promoción de su campaña electoral.

 

La Marea Rosa, inicialmente una movilización ciudadana para defender al INE y promover el voto, tomó tintes de un acto de campaña conforme avanzaba, especialmente con la participación de Gálvez y otros candidatos locales.

 

Esta transformación ha llevado al INE a clasificar el evento como un acto de campaña, sujeto a las regulaciones y fiscalizaciones correspondientes establecidas en el Artículo 199 del Acuerdo sobre Fiscalización y Rendición de Cuentas del INE.

 

Durante el evento, el INE desplegó a 40 auditores para supervisar la movilización. Estos profesionales estuvieron encargados de registrar y evaluar los gastos incurridos durante el acto, que incluyeron el alquiler de pantallas gigantes, sistemas de audio, grúas de transmisión, y la instalación de templetes y vallas metálicas, entre otros. Esta medida responde a la necesidad de garantizar la transparencia y el adecuado uso de recursos en actividades de campaña.

La consejera presidenta del INE, Guadalupe Taddei Zavala, había advertido previamente sobre la necesidad de fiscalizar cualquier evento que involucrara a candidatos en el contexto de la campaña electoral.

 

Por su parte, Max Cortázar, vicecoordinador de la campaña de Gálvez, indicó que estaban preparados para asumir los costos relacionados con su participación en el evento, reconociendo tanto el apoyo de los partidos como el de un amplio sector de la ciudadanía sin afiliación política.

 

La Marea Rosa no solo destacó por su escala, sino también por el contexto en el que se desarrolló, marcado por tensiones políticas y sociales significativas. El evento se realizó en un espacio compartido con manifestaciones de otros grupos, como el plantón de los maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), lo que añade complejidad al análisis del impacto y la recepción de la movilización.

La decisión del INE de fiscalizar este evento es un recordatorio de la rigurosidad con la que se deben manejar las campañas electorales en México, enfatizando la importancia de la transparencia y el cumplimiento de las normativas electorales.

 

La evaluación de este y otros eventos será crucial para determinar la equidad y la legalidad en el proceso electoral en curso, que se caracteriza por ser uno de los más vigilados y disputados en la historia reciente del país.