2 julio, 2024

Emilio Lozoya, exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex), se encuentra en medio de una disputa legal con la Fiscalía General de la República (FGR) por la posesión de su residencia en la exclusiva colonia Lomas de Bezares, Ciudad de México. Esta confrontación surge a raíz de un juicio de extinción de dominio, donde se cuestiona la procedencia de los fondos utilizados para la compra del inmueble, valuado en 38 millones de pesos.

 

El conflicto legal comenzó cuando el Primer Tribunal Colegiado de Apelación en Materias Civil, Administrativa y Especializado en Competencia Económica, Radiodifusión y Telecomunicaciones dictó una sentencia el pasado 9 de mayo. Esta determinó que la residencia debería pasar a ser propiedad de la Federación al no poder acreditar Lozoya la procedencia lícita de los fondos utilizados en su adquisición.

 

Según la FGR, la compra de la propiedad se realizó mediante una triangulación financiera, utilizando recursos provenientes de supuestos sobornos relacionados con la compra-venta de la planta de Agronitrogenados.

 

Ante esta decisión, Emilio Lozoya presentó una demanda de amparo, buscando revertir el fallo del tribunal y recuperar su propiedad. El caso ha sido turnado a un Tribunal Colegiado en Materia Civil, que será el encargado de resolver definitivamente el destino de la residencia.

 

La demanda de amparo planteada por Lozoya sostiene que las pruebas presentadas en el juicio original no son suficientes para demostrar la ilegitimidad en la procedencia de los fondos. El exdirector de Pemex argumenta que la evidencia se centró en demostrar la propiedad del inmueble, pero no la ilegalidad en la adquisición del mismo.

 

Este caso se inserta en un contexto más amplio de investigaciones y juicios contra funcionarios y exfuncionarios por corrupción en México. La situación de Lozoya es especialmente significativa debido a su papel anterior como director de Pemex y su involucramiento en múltiples casos de corrupción que han captado la atención pública y mediática.

 

Si el Tribunal Colegiado en Materia Civil decide a favor de Lozoya, esto no garantizará la devolución inmediata de la propiedad, dado que sigue sujeta a aseguramiento dentro del juicio por el caso Agronitrogenados, donde se le acusa de lavado de dinero. Esta complejidad añade otra capa de incertidumbre al ya intrincado caso legal.

 

La disputa por la residencia en Lomas de Bezares no es solo un conflicto entre un individuo y el estado, sino que refleja las tensiones y desafíos en la lucha contra la corrupción en México. El resultado de este caso podría tener implicaciones significativas para cómo se percibe la efectividad de las leyes de extinción de dominio y la integridad del sistema judicial en el país.

 

A medida que el caso continúa desarrollándose, la sociedad mexicana observa atentamente, esperando resultados que no solo resuelvan la disputa legal, sino que también fortalezcan la confianza en las instituciones encargadas de impartir justicia y combatir la corrupción. La resolución final podría ser un momento definitorio para la percepción pública del estado de derecho en México.