El Congreso de la Ciudad de México dio un paso hacia la armonización de su normatividad al instalar un grupo de trabajo dedicado a revisar y actualizar la Ley Orgánica del Congreso y su Reglamento Interno. Esta iniciativa responde a las contradicciones y “parches” que han surgido entre ambos documentos, complicando el trabajo parlamentario y generando interpretaciones ambiguas.
Alfonso Vega, coordinador de Servicios Parlamentarios e integrante del grupo de trabajo, explicó que estas contradicciones tienen su origen en la Séptima Legislatura de la entonces Asamblea Legislativa del Distrito Federal, cuando se adoptaron partes del reglamento de la Cámara de Diputados. Aunque esta mezcla trajo beneficios, Vega reconoció que la falta de armonización completa ha causado problemas: “Si bien la práctica parlamentaria nos ha permitido salir adelante, creo que es el momento oportuno para plasmarlo en el ordenamiento”.
Royfid Torres, coordinador de la bancada de Movimiento Ciudadano, coincidió en la necesidad de esta revisión, enfatizando que las discrepancias entre la Ley Orgánica y el Reglamento han dificultado el funcionamiento del Congreso. Según Torres, un marco normativo claro y sin ambigüedades facilitará los procesos internos y reducirá la discrecionalidad, haciendo el trabajo legislativo más eficiente.
El consenso entre las distintas bancadas en el Congreso local subraya la importancia de este proyecto. Al revisar y unificar los lineamientos, el objetivo es evitar que las reglas sean interpretadas de forma arbitraria o confusa. La armonización legislativa se convierte así en una herramienta para fortalecer la institucionalidad del Congreso y asegurar que sus procedimientos sean consistentes y transparentes.
Para garantizar el éxito de este esfuerzo, el grupo de trabajo se enfocará en identificar áreas conflictivas y proponer reformas que eliminen los “parches” normativos. La meta es desarrollar una base regulatoria actualizada y funcional que refleje la realidad del Congreso de la Ciudad de México y permita una mejor coordinación entre los distintos órganos.
Este esfuerzo por lograr una normatividad sólida es un avance hacia una mayor transparencia y eficiencia en la vida parlamentaria de la capital. La armonización legislativa no solo beneficiará a los legisladores, sino que también contribuirá a una mejor rendición de cuentas y a una relación más clara con la ciudadanía. Con esta actualización, el Congreso busca consolidar su papel en la vida pública de la ciudad, resolviendo inconsistencias y potenciando su impacto en la sociedad.