6 noviembre, 2024

 

En un panorama inédito para el sistema judicial mexicano, las ministras Lenia Batres y Yasmín Esquivel han confirmado su participación en la primera elección de jueces, magistrados y ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) por voto popular, que se llevará a cabo en junio de 2025.

 

Ambas juristas han señalado que su prioridad será continuar sirviendo al país desde el Poder Judicial, apoyándose en la reciente reforma constitucional que permite a los integrantes actuales de la SCJN participar de forma automática en las elecciones, bajo la premisa del “pase directo” a la boleta.

 

Batres y Esquivel van a la elección vía “pase automático”

La reforma judicial, que entró en vigor el 16 de septiembre de 2024, ha generado una serie de cambios estructurales en el sistema judicial del país. Una de las modificaciones más relevantes es la elección directa de jueces, magistrados y ministros mediante voto popular, lo que representa un cambio radical en la forma en que se eligen los integrantes del Poder Judicial, tradicionalmente nombrados por el Ejecutivo o el Senado.

 

Lenia Batres, quien llegó a la SCJN en diciembre de 2023, tras ser designada directamente por el presidente Andrés Manuel López Obrador, expresó su apoyo a esta reforma y destacó que buscará competir para obtener un escaño en el Pleno de la Suprema Corte a través del voto universal.

 

“Para mí sería un enorme honor poder competir, ir por el voto popular y ser parte del primer pleno electo por voto universal, directo y secreto de nuestro pueblo”, declaró la ministra Batres en una entrevista durante la Feria del Libro de la Ciudad de México.

 

Por su parte, Yasmín Esquivel, quien ha sido ministra de la SCJN desde 2019, manifestó su intención de competir nuevamente, afirmando que “nada sería más gratificante que continuar en este encargo dentro de la Corte”.

 

En este sentido, la magistrada subrayó que la reforma judicial protege los derechos de los trabajadores del Poder Judicial, un tema que ha generado controversia en los últimos meses debido a la preocupación por el futuro de cientos de jueces y magistrados. Durante una entrevista, Esquivel destacó que los derechos laborales de más de 50 mil trabajadores del Poder Judicial están protegidos por la Constitución y aseguró que los jueces y magistrados en funciones tienen la posibilidad de participar en la elección sin perder sus derechos.

 

“Todos los derechos y prestaciones que están en las condiciones generales de trabajo del Poder Judicial están protegidos por la Constitución. Los jueces y magistrados en funciones pueden acceder a la boleta de manera automática y competir con aquellos que los Comités de Evaluación elijan”, afirmó la ministra Esquivel, en respuesta a las críticas sobre el impacto de la tómbola realizada para definir los cargos judiciales a someterse a votación en 2025.

 

Tanto Batres como Esquivel han dejado en claro que quienes actualmente ocupan cargos en el Poder Judicial tienen la posibilidad de utilizar el “pase automático” para aparecer en la boleta electoral, lo que les permitirá postularse sin necesidad de renunciar a sus cargos.

 

La elección de 2025 será histórica por varios motivos, no solo por ser la primera vez que se eligen a ministros y magistrados por voto popular, sino también porque marcará el inicio de una nueva etapa en la relación entre el Poder Judicial y la ciudadanía. El proceso incluirá la elección de cinco ministras y cuatro ministros de la SCJN, así como de otros jueces y magistrados de diversos tribunales en todo el país.

 

Polémicas en torno a la reforma judicial

A pesar de los avances, la reforma judicial ha sido objeto de críticas por parte de algunos sectores, incluyendo miembros del propio Poder Judicial y partidos de oposición, que consideran que la nueva normativa podría poner en riesgo la autonomía de los jueces y magistrados. Una de las principales preocupaciones es que la elección popular pueda convertir los procesos judiciales en un asunto político, alejando a los juzgadores de su deber de imparcialidad.

 

Sin embargo, Batres como Esquivel han defendido la reforma, argumentando que contribuirá a democratizar el sistema judicial y a garantizar una mayor transparencia en la elección de los ministros. “La reforma permitirá que el Poder Judicial sea más eficiente, más transparente y, sobre todo, más cercano a la ciudadanía. Este proceso es una oportunidad para que los ciudadanos tengan una voz en la elección de quienes los representan en el Poder Judicial”, afirmó Batres.