22 noviembre, 2024
Un regreso estratégico al transporte ferroviario, Estado retoma las empresas de trenes

 

El Senado de la República aprobó en comisiones la reforma constitucional que permitirá al Estado retomar el control sobre las empresas de trenes de pasajeros. La iniciativa, que modifica el artículo 28 de la Constitución, ha sido considerada como un avance clave para la infraestructura y movilidad del país, marcando un retorno a la operación estatal de las vías ferroviarias para el transporte de personas.

 

Este lunes, las comisiones unidas de Puntos Constitucionales, Comunicaciones y Transportes, y Estudios Legislativos aprobaron por unanimidad el dictamen que clasifica el transporte ferroviario de pasajeros y bienes como un área estratégica para el desarrollo nacional. Con 37 votos a favor, esta reforma pasa ahora al pleno del Senado, donde se espera que reciba su primera lectura y avance hacia su ratificación en los Congresos estatales.

 

La reforma propuesta busca revitalizar el transporte ferroviario de pasajeros en México, un sector que ha sido prácticamente abandonado desde la privatización de las vías férreas en los años 90, durante el gobierno de Ernesto Zedillo. Desde entonces, el enfoque ha estado en el transporte de carga, lo que ha dejado a la infraestructura ferroviaria del país subutilizada para el desplazamiento de personas.

 

En su intervención, la senadora Laura Estrada Mauro, de Morena, subrayó la importancia de esta reforma para la soberanía y el desarrollo de México. “Hoy nos reunimos para regresarle al pueblo lo robado: el transporte ferroviario, un pilar de nuestro desarrollo económico y social. Esta reforma devolverá el servicio de trenes de pasajeros a donde siempre ha pertenecido: al servicio del pueblo”, afirmó.

 

La red ferroviaria de México cuenta con más de 27,000 kilómetros de vías, la mayoría dedicadas al transporte de carga. La propuesta es aprovechar esta infraestructura para reactivar los trenes de pasajeros y así mejorar la conectividad entre las diferentes regiones del país. Actualmente, este tipo de transporte representa menos del 1% de los desplazamientos a nivel nacional.

 

Movilidad y sustentabilidad  el objetivo

La senadora Mayuli Latifa Martínez, del PAN, expresó su apoyo a la reforma, pero señaló la necesidad de garantizar que los proyectos ferroviarios se apeguen a la legalidad, cuiden el impacto ambiental y se transparenten los gastos. Martínez reconoció que la saturación de las carreteras y la creciente demanda de alternativas de transporte hacen imperativa la modernización del sistema ferroviario en México.

 

Uno de los aspectos más relevantes de la reforma es su alineación con los compromisos internacionales de México en la lucha contra el cambio climático. El transporte ferroviario es considerado una opción mucho más eficiente y menos contaminante que el transporte por carretera o aéreo. Al promover el uso del tren, se espera reducir la emisión de gases de efecto invernadero y mejorar la sustentabilidad del sistema de transporte del país.

 

El senador Luis Donaldo Colosio Riojas, de Movimiento Ciudadano, también respaldó la iniciativa, argumentando que los trenes de pasajeros son una alternativa viable para descongestionar las carreteras y ofrecer un transporte más seguro y eficiente. “Hoy, desplazarse por carretera en México no es sencillo. Muchas vías están en mal estado o son inseguras. Es una oportunidad única para garantizar que México tenga una infraestructura moderna y sostenible para todos sus ciudadanos”, aseguró.

 

Impacto económico y generación de empleo

Además de los beneficios para la movilidad y el medio ambiente, la reforma también tiene un componente importante de desarrollo económico. Al reactivar el sistema ferroviario de pasajeros, se espera la creación de empleos relacionados con la construcción y mantenimiento de nuevas rutas, así como la generación de oportunidades en el sector turístico y comercial.

 

“El retorno de los trenes de pasajeros no solo facilitará el comercio, sino que también impulsará la creación de empleo en las regiones donde se implementen las nuevas rutas. Este es un proyecto que tiene el potencial de dinamizar la economía local y regional”, comentó Carolina Viggiano, senadora del PRI, quien también mostró su apoyo a la iniciativa.

 

La senadora destacó que, si bien se da preferencia a las empresas públicas para operar el sistema ferroviario, los particulares que actualmente tienen concesiones para el transporte de carga podrán participar en el transporte de pasajeros. Esto garantiza que la inversión privada siga jugando un papel relevante en el desarrollo del sistema ferroviario, pero siempre bajo el marco de la rectoría del Estado.

 

Cambio significativo para el futuro del transporte

Con esta reforma, se permitirá al Ejecutivo Federal otorgar asignaciones a empresas públicas o concesiones a particulares para operar las vías férreas en el transporte de pasajeros. Según el dictamen aprobado, el Estado garantizará la continuidad y accesibilidad del servicio, mientras que las concesiones privadas deberán cumplir con los lineamientos establecidos por la legislación en materia ferroviaria.

 

El senador Alejandro González Yáñez, del PT, destacó el papel histórico de la administración de Andrés Manuel López Obrador en impulsar esta reforma y el compromiso de la presidenta Claudia Sheinbaum en continuar con su implementación. “Con esta nueva infraestructura ferroviaria, estamos ante el umbral de hacer de México una potencia económica. El tren de pasajeros es una vía hacia la soberanía económica y la justicia social”, afirmó González Yáñez.

 

La reforma también establece que los trenes de pasajeros serán considerados un área prioritaria para el desarrollo nacional, al igual que la comunicación vía satélite y la generación de energía nuclear. Esto asegura que el Estado mantendrá el control sobre la planificación y operación de este servicio estratégico.

 

Aprobación en el Senado y congresos estatales

Después de su aprobación en comisiones, la reforma será sometida a la votación del pleno del Senado en los próximos días. Se espera que, una vez aprobada en el Senado, el dictamen sea enviado a los congresos estatales para su ratificación final. Con el respaldo de los gobiernos locales y las cámaras empresariales, el sistema ferroviario de pasajeros podría comenzar a operar en los próximos años, marcando el retorno de un medio de transporte fundamental para la conectividad y el desarrollo del país.