A solo cuatro semanas de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, Kamala Harris, candidata demócrata a la Casa Blanca, encabeza ligeramente las encuestas nacionales frente a su rival republicano, Donald Trump. Según un sondeo publicado por The New York Times en colaboración con Siena College, Harris cuenta con el 49% de las intenciones de voto, mientras que Trump alcanza el 46%.
Sin embargo, el resultado final se definirá en un puñado de estados clave como Arizona, Pensilvania y Georgia, donde ambos candidatos se mantienen muy igualados. Estas elecciones llegan en un momento de tensión creciente en la sociedad estadounidense, marcada por el retiro del presidente Joe Biden y la reciente condena penal de Trump.
Kamala Harris, de 59 años, ha advertido sobre los riesgos de un nuevo mandato de Trump, a quien acusó de tener “deseos dictatoriales”. Por su parte, Trump ha intensificado su campaña con múltiples mítines y entrevistas, atacando a Harris y a los demócratas en temas como la economía y la seguridad.
A pesar de la competencia cerrada, Harris ha ganado cierto apoyo entre los republicanos moderados y promete un gabinete diverso si es elegida. Además, cuenta con la excongresista republicana Liz Cheney como una de sus aliadas en la campaña.
El expresidente Trump, de 78 años, no ha cesado su actividad electoral, con eventos en varios estados, incluso en bastiones demócratas como California, donde espera atraer votantes descontentos.
Ambos candidatos enfrentan retos dentro de sus propias bases, y cada voto será crucial para definir el futuro político de Estados Unidos en esta disputada contienda presidencial.