22 noviembre, 2024

En un reciente análisis de la Reforma de Pensiones propuesta por la bancada de Morena en la Cámara de Diputados, varios expertos han expresado preocupaciones significativas sobre la equidad y justicia del llamado “Fondo de Pensiones del Bienestar”.

 

Según los expertos, este proyecto podría tener consecuencias fiscales severas a mediano y largo plazo para México, además de ser considerado como una medida paliativa que no resuelve las deficiencias fundamentales en el sistema de pago de pensiones.

 

Carlos Ramírez, expresidente de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar), critica duramente el fondo por generar expectativas poco realistas sobre las jubilaciones. Ramírez señaló que este fondo no asegura una jubilación al 100% del último salario, lo que considera una falsa promesa a la población, especialmente preocupante a pocas semanas de la elección presidencial.

 

“Es inequitativa e injusta y tiene urgencia electoral. Está comprometiendo fiscalmente al sistema a corto y mediano plazos”, recalcó Ramírez.

El proyecto también ha sido tachado de opaco y potencialmente perjudicial para las personas más vulnerables. Según la iniciativa, el fondo recogería el dinero de cuentas inactivas o abandonadas, incluyendo las de migrantes y personas fallecidas sin herederos conocidos. Esta estrategia ha sido criticada por no buscar activamente a estos individuos o sus familiares legítimos antes de redistribuir sus fondos.

 

Por su parte Rolando Silva Briceño, de la Comisión Técnica de Seguridad Social del Colegio de Contadores Públicos de México, explica que la reforma posee varias lagunas legales y operativas. Aún no se ha detallado cómo se determinará el pago exacto a los trabajadores que, después de los 70 años, intenten reclamar sus ahorros, lo que añade incertidumbre al proceso.

 

La financiación del fondo es otro punto de conflicto. Aunque la reforma de 2020 estableció que el gobierno debe financiar las pensiones, no se aclara cómo se complementará esto con los ahorros individuales de las Afores. Silva Briceño argumenta que sin una contribución adecuada de estos ahorros, el fondo no podría cubrir adecuadamente las pensiones, calificándolo de insuficiente y meramente paliativo.

 

A su vez Abraham Vela, también expresidente de la Consar, coincide en que la medida es poco prudente y cuestiona cómo se manejarán los recursos para los mayores de 70 años, poniendo en duda la viabilidad y sostenibilidad del sistema propuesto.

 

Estas críticas resaltan preocupaciones importantes sobre la justicia y efectividad de la reforma de pensiones. Los expertos advierten que, sin cambios significativos, el proyecto no solo fallará en ofrecer seguridad financiera a los futuros jubilados, sino que también podría imponer una presión fiscal insostenible sobre el país.

 

El debate continúa mientras los legisladores llevan el dictamen de la iniciativa a su discusión en el pleno de la Cámara de Diputados, Una Reforma que tendrá implicaciones sobre millones de mexicanos en los próximos años.