Tras el paso del huracán Beryl por el estado de Yucatán, la vida cotidiana comienza a retornar la normalidad. El Aeropuerto Internacional de Mérida reanudó sus actividades, así como la capital del estado y los 105 municipios, retirando las medidas preventivas como tablones y cintas colocadas en puertas y ventanas.
El huracán Beryl, aunque dejó algunos estragos, también trajo consigo un impulso inesperado para la economía local, especialmente en el sector comercial. De acuerdo con datos actualizados de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH), el comercio en Yucatán registró ganancias extraordinarias de aproximadamente 2 mil 814 millones de pesos en tan sólo dos días. Este incremento significativo en las ventas se dio principalmente en supermercados, tiendas de autoservicio y tiendas de la esquina.
Esto dado a que las familias yucatecas, previendo la llegada de Beryl, se prepararon comprando víveres y enseres suficientes para enfrentar la tormenta durante al menos tres a siete días. Los productos más demandados fueron alimentos no perecederos, agua embotellada y madera para tapiado, entre otros. Este comportamiento preventivo ayudó a mitigar los efectos del huracán en la población, asegurando que tuvieran los recursos necesarios durante y después del evento.
Protección Civil y las Medidas Preventivas
Ante la llegada del huracán, como medidas preventivas, las autoridades de protección civil desplegaron un amplio operativo para garantizar la seguridad de los ciudadanos. Se habilitaron refugios temporales en diversas localidades para aquellos que se encontraban en zonas de riesgo. Además, se implementaron brigadas de vigilancia y asistencia para atender cualquier emergencia y coordinar la limpieza de las áreas afectadas.
Con el huracán ya alejado de las costas de Yucatán, se comenzaron a restablecer todos los servicios esenciales. La electricidad y el agua potable, que en algunas zonas habían sido interrumpidas, están siendo restauradas de manera gradual. Las autoridades locales han trabajado de la mano con empresas de servicios públicos para asegurar que las interrupciones sean mínimas y que todos los habitantes recuperen el acceso a estos servicios lo antes posible.
La recuperación no ha sido solo tarea de las autoridades, la comunidad yucateca ha mostrado una gran solidaridad y espíritu de colaboración. Vecinos se han unido para limpiar calles y retirar escombros, demostrando que, ante la adversidad, la unión hace la fuerza. Las redes sociales se han inundado de mensajes de apoyo y coordinación para asistir a quienes más lo necesitan.
Evaluación de daños y reconstrucción
Actualmente, se está llevando a cabo una evaluación exhaustiva de los daños causados por Beryl. Las autoridades han solicitado a los ciudadanos reportar cualquier daño estructural o necesidad de asistencia a través de líneas telefónicas y aplicaciones móviles dedicadas a emergencias. Con esta información, se priorizarán las áreas más afectadas para su pronta reconstrucción.
