En un escenario político cada vez más polarizado en la Ciudad de México, Xóchitl Gálvez, respaldada por líderes de los partidos PRI, PAN y PRD, ha solicitado al Instituto Nacional Electoral (INE) la cancelación de las conferencias matutinas del presidente Andrés Manuel López Obrador, conocidas como “mañaneras”. Este llamado es una respuesta directa a la percepción de que las intervenciones del presidente en estas conferencias podrían estar influyendo indebidamente en el proceso electoral en curso.
La propuesta de Gálvez se presentó durante una reunión prolongada con Guadalupe Taddei, presidenta del INE, subrayando la preocupación por una posible falta de equidad electoral. La principal alegación es que el presidente López Obrador ha ignorado repetidamente los llamamientos del INE para mantener neutralidad durante el periodo electoral.
Más allá de la petición de cancelar las “mañaneras”, Gálvez destacó la necesidad de clarificar el papel de los programas sociales en el marco electoral, insistiendo en que se debe educar al público sobre la independencia de estos programas respecto a los partidos políticos y sobre las consecuencias legales de su uso indebido en la política.
El INE, tras escuchar estas preocupaciones, anticipó que cualquier decisión sobre las “mañaneras” se tomará en el Consejo General, y confirmó que se lanzará una campaña mediática para informar sobre la correcta gestión y percepción de los programas sociales.
Este incidente no es aislado. Anteriormente, el INE ya había ordenado la suspensión o modificación de varias “mañaneras” por considerar que transgredían los límites de imparcialidad y equidad electoral. Estas acciones muestran la creciente tensión entre la autoridad electoral y la presidencia, subrayando las complejidades de la democracia en un ambiente político altamente mediático.
En paralelo a este enfrentamiento político-electoral, la Ciudad de México se encuentra inmersa en otras polémicas, como la lucha por el control de la alcaldía Benito Juárez entre Morena y el PAN, y los problemas de contaminación del agua en dicha alcaldía, lo que añade capas de complejidad al panorama político y social de la capital.
El debate sobre las “mañaneras” y su influencia en la equidad electoral se ha convertido en un punto focal en la política mexicana, simbolizando la lucha más amplia por la transparencia, la equidad y la democracia en el país. A medida que el proceso electoral avanza, la decisión del INE respecto a las “mañaneras” será un precedente significativo en la definición de los límites entre la comunicación gubernamental y la propaganda electoral en México.
