2 julio, 2024

La polémica envuelve nuevamente a la magna obra del sureste mexicano, el Tren Maya. Tras el descarrilamiento de un vagón en la estación Tixcocob, Yucatán, la candidata Presidencial de la oposición Xóchitl Gálvez, señala  que es resultado de los actos de corrupción que envuelven al proyecto.

 

La aspirante de la coalición PAN-PRI-PRD, anunció que presentó una denuncia ante Fiscalía Especializada en Materia de Combate a la Corrupción, para que se investiguen presuntas irregularidades en la asignación de contratos para la compra de balasto, un material crucial en la construcción del Tren Maya; la cual, involucra a familiares y cercanos del Presidente Andrés Manuel López Obrador.

 

Además señala que están fundamentadas las irregularidades que habrían inflado significativamente el costo del proyecto, pasando de una estimación inicial de 120 mil millones de pesos a más de 500 mil millones.

 

El proyecto del Tren Maya, inaugurado en diciembre de 2023, ha sido presentado por el Presidente López Obrador como una iniciativa noble para conectar y desarrollar el sureste de México, sin embargo, Gálvez ha señalado que, en lugar de representar un avance para la región, el proyecto se ha convertido en un “gran acto de corrupción”.

 

La denuncia de la candidata involucra a los hijos del Presidente, Andrés Manuel y Gonzalo López Beltrán, así como a sus sobrinos Pedro y Osterlen Salazar Beltrán; además de su amigo Amílcar Olán. Cabe señalar que las acusaciones se basan en investigaciones periodísticas que revelan una presunta red de tráfico de influencias y corrupción en la asignación de contratos para el abastecimiento de balasto.

 

Esta denuncia se produce en un momento delicado para el proyecto, toda vez que se da a solo tres meses de su inauguración, y afortunadamente el incidente no dejó lesionados, pero ha avivado las críticas sobre la calidad de la construcción y los materiales utilizados en el proyecto.

 

Luego del incidente, la empresa Tren Maya anunció que se iniciaba una investigación exhaustiva para determinar las causas del descarrilamiento y prevenir futuros sucesos;  sin embargo, Gálvez ha reiterado que no pedirá la cancelación del proyecto, sino que busca que se investiguen las posibles irregularidades y actos de corrupción asociados a su construcción.