La Jefa de Gobierno, Clara Brugada, dio inicio a la ceremonia con un emotivo mensaje para las y los capitalinos y visitantes de otras partes de México y el mundo. “Este es un momento de recordar y celebrar a nuestros seres queridos que ya no están, un tiempo de alegría y nostalgia en nuestra Ciudad de México vibrante y llena de energía”, expresó Brugada. La mandataria también invitó a toda la población a disfrutar de las diversas actividades y a participar en esta tradición ancestral.
Además de las ofrendas, la celebración incluyó un paseo nocturno en bicicleta, donde 90,500 personas, muchas disfrazadas, recorrieron el Centro Histórico en una expresión cultural que mezcla lo moderno con lo tradicional.
El arte detrás de la Ofrenda Monumental
La secretaria de Cultura, Ana Francis López Bayghen, detalló la colaboración con el Colectivo Xibalbá, responsable de la creación de la Ofrenda Monumental. Junto a otros colectivos como El Volador, Zion Art y Comparsa Río de Papel, los artistas trabajaron con técnicas de cartonería, uno de los movimientos estéticos más representativos de México. López Bayghen resaltó que este tipo de obras no solo son artísticas, sino que también requieren habilidades técnicas y conocimientos ancestrales, reflejando la unión de saberes entre arquitectos, constructores y artistas plásticos.
“Esta obra es posible gracias a la participación de más de 100 artistas de diferentes partes de la ciudad, quienes han creado estas figuras con gran detalle, llenas de expresión y movimiento”, explicó. Los asistentes que se acercaron a las figuras pudieron apreciar la complejidad y el trabajo artesanal detrás de cada pieza.
Un espectáculo iluminado en el corazón de la ciudad
El Secretario de Obras y Servicios, Raúl Basulto Luviano, dirigió el encendido de las luces que decoran tanto la ofrenda como los edificios aledaños. En colaboración con un equipo de 60 trabajadores de la Dirección de Alumbrado Público, se creó un diseño de iluminación en dos conjuntos monumentales, que incluye una gran calavera con corona de flores y mosaicos luminosos que resaltan la belleza de la festividad. “Esta iluminación permanecerá hasta el 3 de noviembre, para que todos puedan disfrutarla en cualquier momento”, comentó Basulto Luviano.
La puesta en escena incluye flores de cempasúchil, que representan el color y la vida en esta tradición, y elementos como trajineras y una chinampa monumental en homenaje a Xochimilco, un sitio de gran relevancia cultural. “Este año esperamos la visita de más de un millón de personas, una cifra que refleja el amor de nuestro pueblo por sus tradiciones”, señaló Brugada.
Celebrando en las alcaldías y más allá del Zócalo
Argel Gómez Concheiro, Director General de Grandes Festivales Comunitarios, enfatizó la importancia de este evento y de la variedad de celebraciones que se realizan en toda la ciudad. “Recordemos que también en las alcaldías hay eventos para recibir a los muertos. Invitamos a la población a visitar Mixquic, Azcapotzalco y Xochimilco, donde La Llorona y otras representaciones culturales reviven esta fiesta con gran emoción”, destacó.
Además, el Desfile de Día de Muertos, uno de los eventos más esperados, partirá de la Puerta de los Leones en Chapultepec y culminará en el Zócalo el próximo 2 de noviembre. Este desfile contará con más de 30 carros alegóricos y miles de personas que celebrarán la vida y la memoria de los que ya no están.
Una ofrenda monumental que es reflejo de la identidad mexicana
La Ofrenda Monumental de este año lleva por nombre “Procesión” y se inspiró en una obra gráfica de Eduardo Robledo. Con 21 piezas monumentales y un espejo de agua de 200 metros cuadrados, esta ofrenda busca representar la diversidad de México y su profunda relación con la muerte como parte de la vida. Los 10,000 cempasúchiles de Xochimilco que rodean la ofrenda recuerdan a los visitantes el vínculo entre la naturaleza y la espiritualidad que define esta festividad.
La jefa de Gobierno concluyó el evento agradeciendo a todos los trabajadores de la Secretaría de Cultura y la Secretaría de Obras y Servicios por su dedicación. “Es una obra de arte maravillosa y un orgullo para todas las mexicanas y mexicanos. Hoy, el Zócalo expresa la unión entre cultura, arte y tradición en una de las celebraciones más importantes para el pueblo de México.”
El evento también fue un espacio para reflexionar sobre el impacto cultural de esta festividad. La ministra de Cultura destacó el esfuerzo de los colectivos de artistas en preservar técnicas tradicionales, y Argel Gómez, pionero de los festivales comunitarios en la capital, elogió la vibrante energía de la celebración. Los comentarios de los asistentes también se hicieron escuchar, entre aplausos y expresiones de asombro ante la belleza y magnitud de las ofrendas.
La tradición que une y transforma
El Día de Muertos en el Zócalo es un evento que sigue creciendo en alcance y participación. Además de su importancia cultural, esta celebración es una oportunidad para la convivencia y el fortalecimiento de los lazos comunitarios. Cada elemento de la ofrenda y cada actividad en torno a ella –desde el paseo en bicicleta hasta el desfile de Catrinas– refleja la identidad mexicana y su vínculo con el pasado y el presente.
Para quienes aún no han visitado el Zócalo, la Ofrenda Monumental y el alumbrado estarán disponibles hasta el 3 de noviembre. Esta es una oportunidad única para sumergirse en el color, el arte y la espiritualidad que el Día de Muertos representa para México y para todos aquellos que deseen compartir esta tradición.
Con una ciudad vestida de flores, luces y calaveras, la Ciudad de México invita a todos a recordar, celebrar y mantener viva la tradición que une a los mexicanos con sus ancestros y que, año tras año, sigue dejando una huella profunda en el corazón de la capital.