El Tren Interurbano México-Toluca, conocido como “El Insurgente”, está a punto de iniciar operaciones en su fase II, transformando la movilidad en la zona Lerma – Santa Fe. Este medio de transporte promete no solo reducir considerablemente los tiempos de traslado, sino también ofrecer un viaje económico y eficiente para millones de personas que ahora podrán trasladarse de Santa Fe a Zinacantepec. .
Durante la conferencia mañanera de este 22 de agosto, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, acompañado por el titular de Banobras, Jorge Mendoza Sánchez, ofreció detalles cruciales sobre el costo y los beneficios del recorrido que irá desde Santa Fe hasta Zinacantepec.
Mendoza Sánchez informó que el precio del viaje será de 90 pesos, y el tiempo total de traslado será de tan solo 37 minutos. Esto representa una mejora significativa en comparación con las más de 1.5 horas que se tardan actualmente en realizar el mismo trayecto en transporte terrestre.
El proyecto de El Insurgente, que beneficiará a alrededor de 5 millones de personas, se ha dividido en tres etapas. La primera fase, que abarca el tramo de Zinacantepec a Lerma, ya está en funcionamiento desde el 15 de septiembre de 2023. Esta etapa inicial ha permitido un avance sustancial en la conectividad entre estos municipios y la capital del Estado de México, Toluca.
La segunda fase, que comprende el tramo de Lerma a Santa Fe, se espera que inicie operaciones el 31 de agosto de 2024. Según el secretario de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes, Jorge Nuño Lara, esta etapa será clave para mejorar la movilidad en las alcaldías de Cuajimalpa y Álvaro Obregón, así como en los municipios de Zinacantepec, Toluca, Metepec, Lerma, San Mateo Atenco y Ocoyoacac. Se estima que el tren tendrá la capacidad de transportar a 235 mil pasajeros al día, lo que aliviará significativamente el tráfico en estas zonas.
Además de los beneficios en movilidad, el proyecto ha generado un impacto positivo en la economía local. Se han creado 17 mil empleos directos y 30 mil indirectos a lo largo de la construcción de las diferentes fases del tren. La tercera fase del proyecto, que cubre un tramo de 17.5 km en la Ciudad de México, aún enfrenta retos. Con un avance del 94%, se espera que esté completada a finales de este año, aunque no estará lista antes de que termine el mandato de López Obrador.
El Tren México-Toluca representa un paso firme hacia un futuro con mejores opciones de transporte público, ofreciendo una alternativa moderna, rápida y accesible para millones de usuarios que diariamente transitan entre la capital y el Estado de México.