22 noviembre, 2024

La “Marcha y concentración por Nuestra Democracia“, convocada por más de 200 organizaciones de la sociedad civil, ha sido motivo para que el Palacio Nacional esté rodeado por un cerco de vallas metálicas. El blindaje se extiende desde la calle de Moneda hasta Corregidora, cubriendo la fachada principal y los costados del recinto histórico, lugar donde despacha el Presidente Andrés Manuel López Obrador.

 

La movilización, que se llevará a cabo el próximo domingo 18, tiene por objeto hacer un llamado al presidente para que se abstenga de intervenir en el proceso electoral. La concentración está programada para replicarse en 117 plazas de todo el país y en casi una veintena de ciudades en seis países extranjeros.

 

Amado Avendaño, uno de los organizadores del evento, señaló que la marcha tomará un enfoque diferente al inicialmente planeado. En lugar de iniciar desde el Monumento a la Revolución, los participantes se dirigirán directamente al Zócalo. Esta modificación busca evitar posibles “cuellos de botella” al arribar al primer cuadro de la ciudad.

 

La concentración está prevista para las 10:00 de la mañana, y se espera que el evento inicie a las 11:00 horas con la lectura del Decálogo a cargo de la activista Ana Lucía Méndez. Entre las solicitudes del Decálogo se encuentra la petición de que el Presidente deje de entrometerse en la elección y que los medios públicos no sean utilizados como instrumentos de propaganda gubernamental.

 

Posteriormente el ex consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova Vianello, tomará la palabra en el evento; además, participarán figuras destacadas como José Woldenberg, ex Presidente del IFE, y el ministro en retiro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), José Ramón Cossío, junto con la ex presidenta de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), María del Carmen Alanís, y la activista Mariclaire Acosta.

 

En cuanto a la vestimenta de los asistentes, los organizadores han sugerido que acudan preferiblemente vestidos de rosa o blanco. La convocatoria no está vinculada a algún partido político o candidatura específica.

 

La agrupación Poder Ciudadano, compuesta por más de 200 organizaciones civiles, encabezará la marcha en 108 ciudades de México y en el extranjero. La movilización busca defender el voto libre ante la percepción de intervención gubernamental en las elecciones.

 

Patricia Elton Benhumea, coordinadora en el Estado de México de Poder Ciudadano, expresó la preocupación de los ciudadanos ante posibles acciones que atenten contra la democracia, como la eliminación de organismos autónomos y la manipulación del Poder Judicial.

 

La convocatoria ha generado reacciones diversas, con la aspirante de la oposición a la Presidencia, Xóchitl Gálvez, anunciando que, aunque simpatiza con las causas de la marcha, no participará para evitar riesgos de denuncias por actos anticipados de campaña.

 

Al respecto, el presidente Andrés Manuel López Obrador ha criticado la marcha, atribuyéndola al empresario Claudio X. González y acusándolo de haber participado en el fraude electoral de 2006. Esta declaración del presidente se suma a un contexto de tensiones políticas y señalamientos entre distintos actores del espectro político.

 

La expectativa crece para la “Marcha por Nuestra Democracia“, que abandera la defensa de las instituciones democráticas.