El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, ha elevado el tono en el marco de las relaciones comerciales entre los países miembros del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC). Durante una conferencia de prensa reciente, Trudeau aseguró que México debe implementar medidas más estrictas para limitar el acceso de mercancías chinas, advirtiendo que su país podría buscar alternativas si no se cumplen estas expectativas.
Trudeau: “Defenderé a los trabajadores canadienses”
El líder canadiense destacó la importancia del T-MEC para su país, pero dejó en claro que Canadá no dudará en explorar otras opciones si México no asume un papel más activo en la contención del comercio chino. “Tenemos un acuerdo comercial absolutamente excepcional en este momento, y es algo que nos gustaría que continuara, sin embargo, mi prioridad siempre será defender a los trabajadores canadienses”, afirmó Trudeau.
Esta postura surge en un contexto de creciente preocupación por el impacto de las importaciones chinas en la economía de Canadá, particularmente en sectores como el acero y los productos tecnológicos. “Estamos dejando todas las puertas abiertas porque nuestro compromiso es proteger la competitividad y los empleos en Canadá”, añadió.
Sheinbaum: México defiende su lugar en el T-MEC
Ante los comentarios de Trudeau, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, se pronunció para desmentir las versiones de que Canadá busca excluir a México del T-MEC. “Él no está de acuerdo con sacar a México del tratado; su posición es fortalecer las relaciones entre los tres países”, declaró Sheinbaum durante una rueda de prensa.
La mandataria subrayó que el T-MEC ha traído beneficios significativos para las economías de México, Canadá y Estados Unidos, y abogó por un análisis objetivo de los logros alcanzados bajo el acuerdo. “Hicimos el planteamiento de documentar los beneficios concretos que el tratado ha traído a cada uno de los países. Estos datos son clave para mostrar cómo el T-MEC ha fortalecido a la región”, explicó.
Sheinbaum también destacó la importancia de mantener el diálogo abierto y constructivo con sus homólogos, incluido el presidente de Estados Unidos, Joe Biden. “Este tratado no solo beneficia a México; también ha generado oportunidades importantes para Canadá y Estados Unidos”, enfatizó.
Impacto de China en el comercio norteamericano
El comercio con China ha sido un tema de fricción dentro del marco del T-MEC, con preocupaciones sobre prácticas desleales y el desvío de mercancías a través de terceros países. Canadá y Estados Unidos han señalado en repetidas ocasiones la necesidad de fortalecer las normas comerciales para evitar que productos chinos ingresen al mercado norteamericano sin las regulaciones adecuadas.
En este sentido, Trudeau sugirió que México debe asumir un rol más activo en la vigilancia de sus fronteras y en la regulación de las importaciones. “Queremos garantizar que las reglas del T-MEC se cumplan a cabalidad para proteger a los trabajadores de nuestra región”, mencionó el primer ministro.
Tratado bajo revisión
La controversia se produce en un momento crítico, ya que el T-MEC está programado para una revisión en 2025. Este proceso permitirá a los tres países evaluar los términos del acuerdo y proponer modificaciones para adaptarse a las condiciones económicas actuales.
Analistas señalan que el comercio con China será uno de los puntos más controvertidos en esta revisión, especialmente considerando las crecientes tensiones comerciales entre China y Estados Unidos. “El T-MEC ha sido un pilar para la integración económica de la región, pero también enfrenta desafíos importantes, como el impacto de las cadenas de suministro globales”, comentó el economista Rodrigo García.
Sheinbaum enfatizó que el T-MEC ha beneficiado significativamente a los tres países. Durante la Cumbre de Líderes del G20, celebrada en Río de Janeiro, defendió el tratado como un ejemplo de cooperación económica exitosa. “El T-MEC fue firmado con el objetivo de fortalecer nuestras economías y eso es exactamente lo que ha hecho. Es importante que sigamos trabajando juntos para maximizar estos beneficios”, afirmó.
La mandataria también sugirió que, de cara a la revisión del tratado, sería valioso contar con un documento oficial que detalle los logros alcanzados por cada nación. “Es crucial tener esta información para presentarla al próximo mandatario de Estados Unidos, Donald Trump, y a su equipo, en caso de que asuma el cargo nuevamente”, añadió.
Futuro incierto, pero con espacio para el diálogo
Aunque las declaraciones de Trudeau han generado cierta tensión, también han abierto la puerta para discutir cómo los tres países pueden trabajar juntos para enfrentar desafíos comunes, como la competencia desleal y la sostenibilidad de sus economías. “La clave estará en fortalecer el diálogo y garantizar que el T-MEC siga siendo un modelo de integración regional”, concluyó García.
Mientras tanto, los líderes de México, Canadá y Estados Unidos tendrán que navegar las complejidades de un entorno comercial global cambiante, manteniendo el equilibrio entre la protección de sus economías y el compromiso con el libre comercio.
