21 noviembre, 2024

“De buenas intenciones está empedrado el camino al infierno” decían las abuelas, con las campañas electorales a punto de terminar, nos hemos llenado de promesas y buenas intenciones -o al menos eso dicen- para que votemos por las opciones políticas que buscan gobernar la Ciudad de México.

 

Ya se acercan las elecciones del 2 de junio para la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, y la contienda se presenta intensa y reñida. Según la última encuesta realizada por El Financiero, los candidatos Clara Brugada de la coalición Morena-PVEM-PT y Santiago Taboada del PAN-PRI-PRD están en una cerrada lucha por el liderazgo de la capital del país.

 

Clara Brugada se perfila con el 51% de la intención de voto en general, mientras que Santiago Taboada sigue de cerca con un 42%, según los datos recabados del 13 al 22 de mayo. No obstante, al enfocarse en los votantes probables, la diferencia se estrecha notablemente: Brugada obtiene el 50% frente al 45% de Taboada, lo que anticipa un final de foto.

 

Ambos candidatos han estado activos en sus giras de cierre de campaña, buscando consolidar su posición y capturar a los votantes indecisos, que según la encuesta representan un 10% del electorado, con un 6% adicional que podría cambiar su voto. Esta pequeña pero significativa proporción del electorado podría ser decisiva en los resultados finales.

La participación esperada ronda el 68%, ligeramente menor que en las elecciones de 2018 que tuvieron un 70.7%. Este año, un notable 74% de los entrevistados afirmó haber decidido su voto, lo que indica un interés sostenido en la gobernanza de la ciudad y en los candidatos propuestos.

 

Los Temas Clave de la Campaña

Los temas dominantes en esta elección incluyen la gestión de la seguridad, la infraestructura urbana, políticas de vivienda y la respuesta a las necesidades de una población diversa y en crecimiento. Los candidatos han presentado plataformas que intentan abordar estos desafíos con soluciones innovadoras y sostenibles, aunque con enfoques diferentes.

La elección no sólo decidirá quién será el próximo Jefe de Gobierno, sino también la composición del Congreso de la Ciudad de México. Actualmente, las preferencias para los diputados locales muestran a la coalición de Morena-PVEM-PT con un 47%, mientras que la coalición PAN-PRI-PRD suma un 44%. Estos resultados podrían influir significativamente en la capacidad del próximo Jefe de Gobierno para implementar su agenda.

El actual Jefe de Gobierno, Martí Batres, muestra una aprobación del 47% y una desaprobación del 44%, reflejando una ciudad dividida en su evaluación de su gestión. Asimismo, el presidente López Obrador tiene una aprobación del 54%, indicando un apoyo moderado a nivel nacional, que podría influir en el voto local.

Con solo días restantes para las elecciones, la campaña por la Jefatura de Gobierno de la CDMX es testimonio de una democracia vibrante y competitiva. Los ciudadanos de la capital se preparan para tomar una decisión crítica que no solo afectará el futuro inmediato de la ciudad sino también el curso político de la nación en los años venideros.

 

Esta elección es un claro ejemplo de cómo la política local puede reflejar y responder a las aspiraciones y preocupaciones de sus ciudadanos, ofreciendo un microcosmos de la dinámica política más amplia de México. A medida que los candidatos entran en la recta final de sus campañas, el mensaje para los votantes es claro: cada voto cuenta en una carrera que promete ser decidida por un margen estrecho.