21 noviembre, 2024

La alcaldía Cuauhtémoc se prepara para enfrentar una definición crucial en su historia político electoral, porque el 23 de julio se ha fijado como fecha para el recuento total de votos de la elección de alcalde, un proceso que no solo busca claridad y certeza, sino que también pone a prueba la fortaleza de nuestras instituciones democráticas.

 

El Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM), recibió el pasado 13 de julio, la notificación oficial para proceder con el recuento. Esta decisión sigue a una resolución del Tribunal Electoral de la Ciudad de México (TECDMX), que se basó en la necesidad de garantizar la certeza sobre los resultados electorales. Aunque la medida fue ordenada para responder a ciertas irregularidades percibidas, no ha estado exenta de controversia y disputa legal.

 

Alessandra Rojo de la Vega, del PAN-PRI-PRD y actualmente alcaldesa electa, ha sido una figura central en este proceso. A pesar de haber sido declarada ganadora, su posición está lejos de ser cómoda, ya que ha prometido impugnar la resolución del tribunal. Su preocupación principal parece centrarse en la legitimidad y el respeto al proceso electoral original.

 

Por otro lado, Caty Monreal, de Morena, quien quedó en segundo lugar, ha mostrado un apoyo firme al recuento. Según Monreal, esta medida no solo es necesaria para asegurar la transparencia, sino que también es un derecho de los votantes obtener certeza sobre la elección.

 

La comunidad en Cuauhtémoc no ha sido un mero espectador. Un grupo de vecinos, respaldando a Rojo de la Vega, ha expresado su descontento mediante protestas. Consideran que el recuento es un desafío directo a la decisión democrática de los votantes y temen que sea una maniobra para cambiar el resultado electoral. Además, han anunciado planes para iniciar juicios electorales para proteger sus derechos políticos.

 

El recuento es una operación compleja que implica revisar los votos de 735 casillas, excluyendo aquellas 126 que ya fueron contadas parcialmente. Este proceso debe completarse en un plazo máximo de cinco días a partir de su inicio, con un esfuerzo coordinado entre el Consejo Distrital 9 y el Consejo Distrital 12 del IECM.

 

Legalmente, la situación es igualmente compleja. El TECDMX y la Sala Regional del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) están en una carrera contra el tiempo para resolver las impugnaciones y garantizar que el recuento se realice bajo un marco legal sólido y justo.

 

El recuento de votos en Cuauhtémoc no es solo un proceso administrativo, es un reflejo de la lucha continua por la transparencia y la justicia en el sistema electoral. Con cada partido político defendiendo sus intereses y cada votante preocupado por la legitimidad de su sufragio, este evento es un testimonio del vibrante, aunque a veces tumultuoso, panorama político de México.