17 septiembre, 2024

La Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) informó que, en una reciente reunión con representantes de Six Flags México, solicitó al parque de diversiones presentar una propuesta alternativa para la instalación de su nueva atracción “Roller Coaster” con el objetivo de evitar la tala de 150 árboles en la zona. Una de las sugerencias fue considerar el estacionamiento como sitio alternativo.

 

La alcaldesa de Tlalpan, Alfa González Magallanes, ha sido clara en su rechazo a otorgar permisos para la construcción del nuevo juego mecánico, argumentando preocupaciones ambientales significativas. El proyecto original de Six Flags implicaba una expansión dentro del Bosque de Tlalpan, una zona protegida, lo que habría requerido la tala de numerosos árboles.

Sedema subrayó que no existe autorización para la construcción del “Roller Coaster”. La Secretaría recomendó al parque de diversiones reconsiderar su propuesta y buscar una ubicación que no afecte el arbolado del área. La Dirección General de Evaluación de Impacto y Regulación Ambiental (DGEIRA) reiteró esta postura, indicando que no se ha aprobado el proyecto denominado “Roller Coaster Tipo A”.

 

 

Alfa González advirtió que el proyecto podría provocar escasez de agua, deterioro ambiental e inundaciones severas en la región.La presión ambiental derivada del crecimiento urbano, la tala clandestina y el descuido del medio ambiente no pueden continuar“, enfatizó la alcaldesa.

 

Ante la controversia generada, Sedema sugirió la realización de una consulta vecinal para informar a los habitantes sobre los detalles del proyecto y las implicaciones ambientales. La Secretaría también propuso que Six Flags presentara alternativas que no requieran la intervención en el arbolado del Bosque de Tlalpan.

 

 

El proyecto de Six Flags ha causado preocupación entre los vecinos de Tlalpan, quienes valoran la preservación de una de las áreas más verdes de la Ciudad de México. La oposición de la alcaldía de Tlalpan y la falta de autorización por parte de Sedema subrayan la importancia de encontrar soluciones que equilibren el desarrollo urbano con la conservación ambiental.

 

El futuro de la nueva atracción de Six Flags México depende ahora de la capacidad del parque para presentar una propuesta que no implique la tala de árboles y que sea aceptable tanto para las autoridades ambientales como para la comunidad local.