En un nuevo capítulo de la política mexicana, Citlalli Hernández y Ernestina Godoy, dos destacadas figuras morenistas y colaboradoras cercanas de la presidenta Claudia Sheinbaum, han presentado una iniciativa de ley que busca reformar la Constitución para eliminar la reelección consecutiva en el Senado, la Cámara de Diputados y los congresos estatales. Esta iniciativa, que ha generado un debate nacional, plantea mantener la posibilidad de reelección únicamente para autoridades municipales.
La iniciativa, que fue difundida recientemente en la Gaceta del Senado, propone una modificación clave en el artículo 59 de la Constitución, estableciendo que los cargos de senadores y diputados federales no serán susceptibles de reelección consecutiva. Sin embargo, se permite que los presidentes municipales, regidores y síndicos puedan ser reelectos por un periodo adicional, siempre y cuando su mandato no supere los tres años.
Propuesta en el Senado
En el centro del debate, Citlalli Hernández y Ernestina Godoy explicaron las razones detrás de esta iniciativa. Ambas senadoras con licencia y ahora funcionarias del gobierno de Claudia Sheinbaum, consideran que la eliminación de la reelección consecutiva para legisladores es un paso necesario para devolver el control al electorado y asegurar la rotación de representantes en los cargos públicos.
“La no reelección legislativa es un principio que ha regido la política mexicana durante décadas, y creemos que es importante retomar este valor para evitar la perpetuación en el poder de figuras políticas que no han mostrado un compromiso real con el bienestar de los ciudadanos”, mencionó Citlalli Hernández en una entrevista reciente. Además, agregó que la reelección en algunos casos ha sido utilizada por los partidos políticos como un mecanismo de control interno más que como una oportunidad para que los votantes evalúen el desempeño de sus representantes.
Debate abierto en el Senado
Carlos Cantón Zetina, presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales del Senado, informó que la iniciativa será procesada con “la mayor apertura democrática”. Durante una rueda de prensa, señaló que este tema será discutido ampliamente, ya que involucra una de las reformas más importantes de los últimos años.
“La mayoría de la población en México no está de acuerdo con la reelección consecutiva. Es un tema que ha generado un rechazo amplio y es nuestro deber como legisladores atender esa demanda popular. Esta reforma es un paso importante para devolverle al pueblo lo que quiere, que es un Congreso que verdaderamente los represente y que no sea visto como una carrera de poder personal”, afirmó Cantón Zetina.
La iniciativa también ha sido respaldada por otros legisladores de Morena, quienes ven en esta propuesta una oportunidad para fortalecer la democracia y limitar el control de los partidos políticos sobre los cargos de elección popular. “En 2014, la reelección fue aprobada como parte de la reforma política, pero en la práctica, hemos visto cómo los partidos han manipulado este mecanismo para perpetuar a figuras que no necesariamente representan los intereses de sus votantes”, agregó un legislador que pidió no ser mencionado.
Contexto histórico de la reelección en México
La reelección de legisladores federales y locales fue aprobada en 2014 como parte de una amplia reforma política impulsada por el Partido Acción Nacional (PAN), que buscaba crear un mecanismo de evaluación continua de los actores políticos. La idea era que aquellos legisladores que demostraran su efectividad y compromiso podrían ser reelegidos por decisión de los ciudadanos, fortaleciendo así la rendición de cuentas.
En 2018, esta reforma entró en vigor, permitiendo que los miembros de la LXIV y LXV Legislaturas del Congreso de la Unión pudieran reelegirse. Sin embargo, la reelección en muchos casos se convirtió en una decisión interna de los partidos políticos, que privilegiaron a legisladores con poca productividad y poca conexión con sus electores.
“Vimos cómo la reelección se convirtió en un premio para ciertos actores políticos que mantenían el control dentro de sus partidos, pero que no siempre respondían a las necesidades de sus electores”, explicó un analista político en un programa de radio local.
En el Senado, por ejemplo, de los 90 senadores que solicitaron ser reelegidos, solo 24 lo lograron. Entre ellos se encontraban 20 legisladores plurinominales, 15 suplentes y tres senadores con licencia que ocuparon otros cargos durante su gestión. Este bajo porcentaje de reelección efectiva demostró que, aunque el mecanismo estaba disponible, no siempre era una decisión respaldada por los ciudadanos.
Reacciones a la propuesta
La propuesta de reforma ha generado reacciones divididas entre los diferentes partidos y sectores de la sociedad. Mientras que algunos consideran que la eliminación de la reelección consecutiva es un paso necesario para garantizar la renovación política y evitar el control de los partidos sobre los legisladores, otros piensan que la reelección permite a los votantes premiar a los representantes que han hecho un buen trabajo.
El Partido Acción Nacional (PAN), uno de los impulsores originales de la reelección legislativa, ha criticado la iniciativa de Morena, argumentando que se trata de una medida regresiva que limitará la posibilidad de los ciudadanos de evaluar el desempeño de sus representantes. “La reelección es una herramienta que permite que los votantes tengan el poder de decidir quién se queda y quién se va. Esta propuesta va en contra de la idea de que los ciudadanos deben tener el control sobre sus representantes”, comentó un legislador del PAN en una reciente conferencia de prensa.
Por otro lado, miembros de la sociedad civil y organizaciones que promueven la transparencia en el gobierno han manifestado su apoyo a la iniciativa. Argumentan que la reelección, tal como se ha implementado en los últimos años, ha favorecido a las élites políticas y ha perpetuado la falta de rendición de cuentas en algunos sectores.
“Lo que hemos visto en los últimos años es que la reelección legislativa ha sido utilizada para beneficiar a figuras políticas que no han mostrado un verdadero compromiso con el bienestar de sus votantes. Esta reforma es una oportunidad para corregir ese rumbo y asegurar que los legisladores realmente representen los intereses de la ciudadanía”, afirmó un representante del Centro Mexicano de Derecho Ambiental (CEMDA) en una mesa redonda organizada por una universidad en la Ciudad de México.