Recientemente, el Sistema de Aguas de la Ciudad de México (SACMEX) ha emitido una respuesta oficial rechazando un informe publicado por VASA Instalaciones. El informe de VASA, que se difundió ampliamente en redes sociales, sugería la presencia de contaminantes orgánicos derivados del petróleo en el agua de algunas colonias de la alcaldía Benito Juárez, como Nápoles, Narvarte y Del Valle.
Incertidumbre sobre la Metodología de VASA
Según SACMEX, VASA Instalaciones no tiene la certificación ni la experiencia necesaria para realizar análisis de agua. El estudio de VASA describió un proceso de tratamiento de oxidación férrica más floculación aplicado a tres muestras de agua. No obstante, SACMEX critica que el informe no especifica qué métodos o normas se utilizaron para determinar la presencia de compuestos orgánicos volátiles. Además, señalan que el tratamiento mencionado solo es útil para oxidar el agua y no para identificar los compuestos mencionados.
Contrariamente a los hallazgos limitados de VASA, SACMEX junto con la Secretaría de Gestión de Riesgos y Protección Civil (SGIRPC) ha analizado más de 1,500 muestras en laboratorios especializados, sin encontrar evidencia que respalde las alegaciones de contaminación por derivados del petróleo. SACMEX enfatiza la necesidad de aplicar análisis por cromatografía de gases-masas y estándares adecuados para cuantificar de manera precisa cualquier contaminante potencial.
Desinformación y preocupaciones de los ciudadanos
La alarma generada por el reporte de VASA llega en un momento de creciente preocupación por la calidad del agua en la Ciudad de México. Los vecinos de las áreas afectadas han expresado su inquietud, especialmente después de que se anunciara la cloración de cisternas en la zona, un proceso que podría ser contraproducente si los hallazgos de VASA fueran ciertos.
SACMEX ha pedido a los ciudadanos y a las entidades involucradas que eviten difundir información no verificada que pueda provocar pánico o malentendidos. La institución reitera su compromiso con la transparencia y la comunicación clara, enfocada en mantener informada a la población con datos verificados y científicamente válidos.
Frente a la crisis, los vecinos no solo han bloqueado vías cruciales, afectando la movilidad, incluyendo la operación de la Línea 1 del Metrobús, sino que también han propuesto un pliego de demandas en una reunión con representantes del gobierno de la Ciudad de México. Entre sus principales exigencias se incluyen:
- Transparencia total sobre la calidad del agua y las sustancias detectadas.
- Acciones gubernamentales directas para la limpieza de cisternas y tinacos.
- Implementación de un plan robusto para el abastecimiento de agua potable.
- Condonación del pago de agua hasta que se resuelva la situación.
Estas demandas se hacen eco del sentimiento de desconfianza y frustración que sienten muchos ciudadanos respecto a la gestión de recursos vitales como el agua. La falta de una respuesta oportuna por parte de las autoridades ha intensificado el malestar, llevando a los vecinos a pernoctar en los puntos de bloqueo como medida de presión.
La ciudad enfrenta un dilema crítico entre la credibilidad de los estudios sobre la calidad del agua y la respuesta institucional a las demandas cívicas. Es esencial que las autoridades proporcionen información clara y basada en evidencias sólidas para restaurar la confianza de los residentes.
Este incidente destaca la importancia de la transparencia y la responsabilidad en la gestión de los servicios públicos, así como la necesidad de una comunicación efectiva entre el gobierno y los ciudadanos en situaciones de crisis. La comunidad espera ahora una acción decisiva que no solo resuelva la situación actual, sino que también prevenga futuras incidencias de este tipo, asegurando un suministro de agua seguro y confiable en el futuro.
Este incidente destaca la necesidad crítica de una gestión de información precisa y una verificación rigurosa en asuntos de salud pública, particularmente en lo que respecta a recursos vitales como el suministro de agua.
