Romina Marcos, hija de la controvertida Niurka Marcos, sorprendió a sus seguidores al revelar con orgullo, que es lesbiana y además, presentó a su novia, la doctora Laura Salazar. La declaración, realizada a través de redes sociales, marcó un momento importante en la vida de la joven cantante y actriz, quien ha destacado por su autenticidad y carisma.
Revelación esperada y llena de orgullo.
Romina, de 29 años, decidió abrir su corazón con sus seguidores al compartir un vídeo en el que escribe: “Ya soy lesbiana” . La publicación generó una ola de reacciones en redes sociales, donde los usuarios expresaron su sorpresa y apoyo.
Poco después, la cantante publicó un TikTok donde dejó entrever quién es la persona que ha conquistado su corazón. En un breve clip, Romina mostró el brazo tatuado de la doctora Laura Salazar, confirmando los rumores que ya circulaban en redes.
La noticia también quedó registrada en las historias de Instagram de la doctora, donde se observa cómo ha convivido con la familia de Romina, incluyendo a Niurka, quien parece haber dado su aprobación a la relación.
¿Quién es Laura Salazar?
Laura Salazar no es una desconocida en las redes sociales. Además de ser médica cirujana, la doctora es una creadora de contenido que se especializa en sexualidad y salud. A través de videos educativos, aborda temas de higiene, prevención de enfermedades y bienestar sexual, ganándose el respeto y la admiración de sus seguidores.
El estilo auténtico y el carisma de Laura también han cautivado a su audiencia, quienes aplauden la relación con Romina. Su look moderno y tatuajes han sido objeto de elogios, consolidándola como una figura atractiva y carismática en redes sociales.
Una relación que inspira
Las muestras de afecto entre Romina y Laura han continuado en redes sociales, donde comparten momentos juntas, demostrando lo enamoradas que están. Las publicaciones han recibido numerosos comentarios positivos, destacando el valor de Romina al compartir esta etapa de su vida con el público.
Romina Marcos ha demostrado que la autenticidad y el amor propio son esenciales para construir relaciones sinceras, ganándose aún más admiradores por su valentía y transparencia. Sin duda, un ejemplo de que el amor no tiene límites.