En el Senado de la República, legisladores de varios partidos han subrayado la urgencia de regular las plataformas digitales y el comercio electrónico. La creciente demanda de compras en línea, exacerbada desde la pandemia de 2020, ha generado un consenso sobre la urgencia de garantizar productos y servicios de calidad para los consumidores y fomentar una competencia justa.
La senadora Claudia Anaya, del PRI, destacó que la falta de una ley reglamentaria ha permitido que la autoridad hacendaria cree normativas para el cobro de impuestos sin una base legal clara. Anaya prevé que una reglamentación específica podría ser incluida en el presupuesto de 2025, ya que las actuales campañas políticas dificultan un periodo extraordinario de sesiones.
“Coincido en que es necesario regular las plataformas digitales, el uso de la inteligencia artificial y otras herramientas tecnológicas que han surgido en los últimos años. Estas innovaciones no estaban contempladas en las leyes actuales, incluyendo el comercio electrónico”, comentó Anaya.
Ella espera que estas disposiciones se incorporen en el nuevo paquete económico de la administración entrante, que estará abierto a debate y modificaciones.
Por su parte, Miguel Ángel Mancera, coordinador del PRD, reconoció la disposición del sector de ventas por internet a ser regulado. Subrayó que las medidas fiscales no deben frenar el comercio electrónico, ya que las empresas serias se ven afectadas por aquellas que operan de manera fraudulenta o sin ética.
“Las empresas en línea no deben ser frenadas a través de procedimientos de verificación y sanción del estado, ya que el comercio electrónico ha superado la normativa vigente”, añadió Mancera.
El legislador también enfatizó que el Senado debe asumir la responsabilidad de regular esta actividad altamente productiva, que representa un nicho de oportunidades para el país.
“Vamos atrasados en la regulación de una actividad que seguirá creciendo y desarrollándose porque las personas la quieren y prefieren en muchos casos”, concluyó.
La urgencia de esta regulación es evidente, dado que el comercio electrónico se ha convertido en un pilar fundamental de la economía moderna. Los legisladores están llamados a garantizar que esta regulación no solo proteja a los consumidores, sino que también fomente la innovación y el crecimiento en este sector vital.
A medida que se acercan las elecciones y el cambio de administración, es crucial que estas discusiones se mantengan en el centro del debate legislativo. La regulación adecuada del comercio electrónico y las plataformas digitales no solo protegerá a los consumidores, sino que también impulsará la economía digital del país hacia un futuro más seguro y próspero.
