19 septiembre, 2024

Después de enfrentar una de las crisis hídricas más severas en su historia, el Sistema Cutzamala muestra signos alentadores de recuperación. Este sistema crucial para el suministro de agua en la Ciudad de México y el Estado de México ha logrado acumular 68 millones 108 mil metros cúbicos de agua desde el inicio de la temporada de lluvias el pasado 19 de junio. Este aumento ha elevado su capacidad de almacenamiento del 26.2% al 34.95%, según informes de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).

 

Este repunte en el almacenamiento de agua ha sido posible gracias a las precipitaciones significativas registradas en las áreas limítrofes de Michoacán y el Edomex, despejando los temores del llamado “Día Cero” de agua, una situación que habría tenido consecuencias drásticas para millones de habitantes. El alivio llegó justo cuando algunas proyecciones indicaban que el sistema estaba al borde de un colapso hídrico total.

 

Durante un evento comunitario en la Colonia Doctores, el Jefe de Gobierno de la CDMX, Martí Batres, comentó sobre la situación, desmintiendo los rumores sobre una inminente crisis de agua. “Algunos, con no precisamente intención de ayudar, decían que venía el ‘Día Cero’, que se iba a acabar el agua y, bueno, el ‘Día Cero’ no llegó; lo decían para asustar a la gente”, afirmó Batres, asegurando que la capital y sus alrededores están fuera de peligro por ahora.

 

El Sistema Cutzamala no solo ha visto mejoras en su capacidad total, sino que también ha registrado incrementos significativos en cada una de sus presas componentes. La Presa El Bosque ahora se encuentra al 48.28% de su capacidad, Valle de Bravo al 31.78%, y Villa Victoria al 27.15%. Estos aumentos son cruciales para mantener el flujo constante y seguro de agua hacia las áreas urbanas densamente pobladas que dependen del sistema.

 

Las lluvias de julio y las proyecciones para agosto indican que esta tendencia positiva podría continuar. Según datos recientes, el mes de julio cerró con una acumulación sustancial de precipitaciones en gran parte de la República Mexicana, y agosto parece seguir el mismo patrón. Las presas del Sistema Cutzamala han sido las grandes beneficiadas, con la Presa El Bosque liderando el grupo con un impresionante 45% de capacidad, seguida por Valle de Bravo y Villa Victoria, que también muestran mejoras notables.

 

Este respiro llega en un momento crucial, con México experimentando un cambio de las condiciones extremas de sequía y calor a un clima más fresco y húmedo, gracias a la influencia de fenómenos como La Niña y varios ciclones y frentes fríos que han cruzado el territorio nacional. Estos eventos climáticos han jugado un papel fundamental en el aumento de los niveles de las presas, proporcionando alivio a las regiones afectadas y a las autoridades hídricas que luchan por gestionar de manera sostenible el recurso vital.

 

Con el panorama hídrico mostrando signos de mejora, las autoridades y los ciudadanos respiran aliviados, pero permanecen vigilantes. La recuperación del Sistema Cutzamala es una buena noticia, pero también es un recordatorio de la necesidad de gestionar los recursos hídricos con prudencia y planificación a largo plazo, especialmente en una era de incertidumbre climática. La colaboración continua, la inversión en infraestructura y la educación sobre el uso sostenible del agua serán clave para asegurar que la Ciudad de México y el Edomex puedan enfrentar futuros desafíos hídricos con mayor resiliencia.