Este 16 de junio, México se prepara para celebrar el Día del Padre, y para esta celebración se estima que habrá una derrama económica de 42 mil millones de pesos, que representa un 10% más que el año pasado.
Octavio de la Torre, presidente de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco Servytur), destacó que este incremento refleja la importancia y el cariño con el que los mexicanos festejan a los padres.
El Día del Padre, que comenzó a celebrarse en los centros escolares de México en 1950, se oficializó en 1972 para el tercer domingo de junio, ha evolucionado hasta convertirse en un evento de significativa relevancia económica. En la actualidad, México cuenta con 21.2 millones de padres, con una edad promedio de 45 años, de los cuales 18.4 millones forman parte de la Población Económicamente Activa (PEA).
La Concanaco Servytur prevé que el mayor incremento en ventas durante estos festejos se dará en varias categorías, como la compra de ropa y calzado, que encabeza el gasto; reflejando la intención de los mexicanos de obsequiar algo útil y duradero a los padres. La tecnología sigue siendo un atractivo principal, con dispositivos como smartphones, tablets y gadgets que capturan el interés de todas las generaciones.
Los artículos personales también tendrán un fuerte repunte en ventas, desde perfumes hasta relojes y accesorios que denotan aprecio y estilo; sin embargo, no todo se reduce a bienes materiales. Los restaurantes y la industria alimentaria en general se preparan para recibir a miles de familias que deciden celebrar con una comida especial. Tanto alimentos como bebidas verán un notable aumento en su consumo, impulsados por la tradición de reunirse en torno a una mesa para homenajear a los padres.
“En México, la celebración de este día ha ido ganando terreno en términos de derrama económica, mostrando un crecimiento constante año con año. Esto no solo refleja el valor sentimental, sino también el impacto positivo en diversos sectores comerciales”, explicó Octavio de la Torre.
La celebración del Día del Padre se ha transformado en un motor económico importante, con múltiples actividades y participaciones que benefician al comercio. Las ventas online también jugarán un rol crucial, con muchas personas aprovechando las ofertas y promociones disponibles en diversas plataformas digitales.
En conclusión, el Día del Padre en México no solo es un homenaje a los pilares de las familias, sino también una oportunidad significativa para el dinamismo económico.
Este año, con un gasto estimado de 42 mil millones de pesos, se demuestra que la ocasión es tanto una muestra de amor y gratitud como un impulso para múltiples sectores de la economía nacional. La tendencia apunta a que ropa, calzado, tecnología, artículos personales, restaurantes, alimentos y bebidas serán los principales beneficiarios de este festivo día.