Percepción de inseguridad en la ciudad, baja más de 34 puntos, INEGI: Resalta Martí Batres
El INEGI presentó en abril de este año los resultados de la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU)
• A nivel nacional, en marzo de 2024, 61.0 % de la población de 18 años y más
consideró inseguro vivir en su ciudad.
• Durante marzo de 2024, 66.5 % de las mujeres y 54.5 % de los hombres
consideraron inseguro vivir en su ciudad.
• Las ciudades con mayor porcentaje de población de 18 años y más que sintieron
inseguridad fueron: Fresnillo (95.4 %), Naucalpan de Juárez (89.6 %),
Zacatecas (89.3 %), Chilpancingo de los Bravo (87.3 %), Cuernavaca (87.0 %)
y Ciudad Obregón (86.6 %).
En el caso de la Ciudad de México, el tema de la seguridad siempre ha sido una preocupación central para sus habitantes y administradores; sin embargo, recientes datos presentados por el Jefe de Gobierno, Martí Batres Guadarrama, indican un cambio notable en la percepción de la seguridad en la capital.
Según las encuestas del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), correspondientes al primer trimestre de 2024, la percepción de inseguridad ha disminuido en 34.8 puntos porcentuales. Este cambio representa un avance significativo en la lucha contra el crimen y la mejora en la calidad de vida de los capitalinos.
Evolución de la Percepción de Inseguridad
Desde el año 2018, la Ciudad de México enfrentó niveles altamente preocupantes de percepción de inseguridad, con un pico de 92.3% durante el primer trimestre de aquel año. Este fue el punto más alto desde que se tiene registro, reflejando un clima de inseguridad palpable entre los residentes de la capital.
Desde entonces, la percepción ha ido disminuyendo progresivamente a lo largo de los años, llegando a 57.5% en el primer trimestre de 2024. Esta reducción se ha mantenido constante y muestra la eficacia de las políticas de seguridad implementadas por la administración actual.
El Jefe de Gobierno enfatizó que la disminución en la percepción de inseguridad no es un fenómeno aislado o producto de la casualidad, sino el resultado de esfuerzos concertados por parte del Gobierno de la Ciudad de México, especialmente a través de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC). Este organismo ha sido fundamental en la implementación de estrategias orientadas a la reducción de los índices delictivos y, por consiguiente, a la mejora en la percepción de seguridad. Un ejemplo citado por Batres fue la rápida acción de la SSC en el caso de un feminicidio en la colonia Álamos, donde el responsable fue detenido oportunamente.
Además, Martí Batres hizo hincapié en combatir la desinformación que circula en redes sociales, la cual a menudo distorsiona los logros en materia de seguridad. Contrario a las afirmaciones falsas, los datos presentados son un testimonio claro del progreso tangible que la ciudad ha experimentado en términos de seguridad. Este tipo de información precisa y verificable es crucial para mantener informada a la ciudadanía sobre los verdaderos avances en la seguridad de su entorno.
La administración de la Ciudad de México planea continuar con su enfoque proactivo en la gestión de la seguridad urbana. La sostenibilidad de las mejoras en la percepción de seguridad dependerá del mantenimiento de políticas efectivas y de la implementación de nuevas estrategias que se adapten a los cambiantes desafíos en materia de seguridad pública.
Para los habitantes de la Ciudad de México, estos cambios se traducen en una vida cotidiana más tranquila y segura. La disminución en la percepción de inseguridad tiene efectos directos en la confianza de los ciudadanos al realizar sus actividades diarias y al planificar su futuro en la capital. Además, mejora la imagen de la ciudad tanto a nivel nacional como internacional, potenciando su atractivo como destino para turistas y para inversiones.
En resumen, los datos presentados por el Jefe de Gobierno, Martí Batres, subrayan una mejora sustancial en la percepción de seguridad en la Ciudad de México, un testimonio de las políticas de seguridad efectivas y del trabajo incansable de las autoridades. A medida que la ciudad continúa fortaleciendo su infraestructura de seguridad, los ciudadanos pueden esperar un entorno cada vez más seguro y propicio para el desarrollo personal y colectivo.