En un encuentro este miércoles en Palacio Nacional, el Presidente Andrés Manuel López Obrador sostuvo una reunión de más de dos horas con Raquel Serur, ex embajadora de México en Ecuador. Esta reunión marca la primera vez que ambos se ven cara a cara desde la tensa situación diplomática que se vivió con Ecuador.
El incidente, que capturó la atención internacional, ocurrió después de un asalto armado a la embajada mexicana en Quito, donde militares intentaron sustraer a Jorge Glas, ex vicepresidente ecuatoriano. Glas había obtenido asilo político de México un día antes del asalto del 4 de abril, lo que exacerbó las tensiones diplomáticas.
La situación escaló cuando el gobierno de Daniel Noboa, Presidente de Ecuador, declaró a Serur como persona non grata, en respuesta a los comentarios de López Obrador sobre los resultados electorales en Ecuador, lo que precipitó su regreso a México a principios de este mes.
La reunión de hoy, realizada a puerta cerrada, no sólo refleja los esfuerzos de la diplomacia mexicana para gestionar las secuelas del incidente, sino también la importancia de fortalecer las relaciones bilaterales en un momento en que México busca reafirmar su posición en la arena internacional.
Este encuentro privado, el primero desde el retorno de Serur a México, se produce en un momento delicado para la política exterior mexicana, destacando la urgencia de resolver pacíficamente las disputas diplomáticas y reforzar la seguridad de sus misiones en el extranjero.
Con la mirada del mundo sobre ellos, los detalles y resultados de esta reunión podrían definir el curso futuro de las relaciones entre México y Ecuador.
