El conflicto entre el Poder Judicial y el Poder Ejecutivo en México ha escalado a un nuevo nivel. Trabajadores del Poder Judicial respondieron de manera contundente a las declaraciones de la Presidenta electa, Claudia Sheinbaum, quien criticó el paro laboral en el que se encuentran, calificándolo como “poco ético” dado que continúan recibiendo su salario.
En una rueda de prensa frente al recinto judicial de San Lázaro, Patricia Aguayo, vocera del Movimiento de Trabajadores del Poder Judicial y secretaria del Décimo Tribunal Colegiado en Materia del Trabajo, expresó que “si hablamos de ética, creo que el partido en el poder tiene mucha más cola que le pisen. Nosotros somos trabajadores honrados, que vivimos de nuestro trabajo.”
Aguayo defendió la legitimidad del paro laboral, argumentando que se está realizando “bajo el marco constitucional correspondiente a su derecho de libertad de expresión”. La vocera dejó claro que la protesta seguirá y no descartó la posibilidad de que se radicalice en los próximos días.
El paro de los trabajadores se inició como una respuesta a la propuesta de reforma judicial impulsada por la administración actual, que ha sido vista por muchos dentro del sector como un intento de socavar la independencia del Poder Judicial y concentrar más poder en el Ejecutivo. La protesta ha encontrado eco no solo dentro de México, sino también en otros países, incluyendo Estados Unidos y Canadá, que han expresado su preocupación por el posible impacto de estas reformas en las relaciones bilaterales y en el acuerdo comercial T-MEC.
En relación a los posicionamientos internacionales, Patricia Aguayo señaló que están de acuerdo con los comunicados emitidos por Estados Unidos y Canadá, afirmando que la reforma judicial, tal como se plantea, “va a ser adversa para los intereses comunes que maneja México, con una agenda que tiene con sus vecinos y con sus socios comerciales.”
Otra de las tensiones surgió a partir de las amenazas emitidas por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), que advirtió sobre posibles recortes salariales o despidos para aquellos trabajadores que participen en el paro. Aguayo fue tajante al respecto: “El organismo no tiene facultad para tomar esa decisión pues corresponde al Poder Ejecutivo, no al Judicial.”
Además, cuestionó la legitimidad de las acciones de la SHCP, señalando que “¿de dónde se toman facultades para mandarle un oficio al Consejo de la Judicatura que pertenece al Poder Judicial autónomo e independiente para que Hacienda y Gobernación le diga al Consejo que nos descuente nuestros salarios? Somos independientes, autónomos, el Poder Judicial es uno, el Poder Ejecutivo es otro.”
Hasta el momento, según Aguayo, no han recibido ningún comunicado oficial por parte del Consejo de la Judicatura en relación a los posibles descuentos salariales o despidos. “Nosotros permanecemos aquí y nuestro patrón es el Consejo de la Judicatura, no dependemos ni de Hacienda, ni de Gobernación, ni del Ejecutivo Federal,” subrayó.
El paro, que ya lleva varios días, ha causado una serie de complicaciones en el sistema judicial del país. Diversos sectores han expresado su preocupación por los efectos que podría tener en la impartición de justicia, pero los trabajadores del Poder Judicial han dejado en claro que consideran esta medida como necesaria para proteger la independencia del Poder Judicial.
La crítica principal de los trabajadores del Poder Judicial se centra en la percepción de que la reforma propuesta es un intento de politizar un poder que, por su naturaleza, debe ser autónomo e imparcial. Este sentimiento de defensa de la independencia judicial se refleja en la firme postura de no ceder ante lo que consideran presiones del Ejecutivo.
Por su parte, Claudia Sheinbaum ha mantenido su postura crítica frente al paro, argumentando que los trabajadores están incumpliendo con su deber al detener sus labores mientras continúan recibiendo su salario. Sheinbaum ha señalado que el paro perjudica a la ciudadanía, ya que retrasa la impartición de justicia en un momento crítico para el país.
El presidente Andrés Manuel López Obrador también ha intervenido en el debate, advirtiendo a los trabajadores del Poder Judicial en paro que “hay un juez y es el pueblo.” Esta declaración ha sido interpretada como una forma de presión adicional para que los trabajadores del Poder Judicial retomen sus labores.
El conflicto entre los trabajadores del Poder Judicial y el Ejecutivo parece estar lejos de resolverse. Mientras el paro continúa, las tensiones entre ambos poderes siguen aumentando. Patricia Aguayo ha indicado que, en ausencia de un diálogo efectivo, las acciones podrían intensificarse. La vocera subrayó que el movimiento no se detendrá hasta que sus demandas sean escuchadas y la independencia del Poder Judicial esté garantizada.
En este contexto, es incierto cómo se resolverá este conflicto. Lo que sí está claro es que la lucha por la autonomía del Poder Judicial ha puesto en el centro del debate nacional la relación entre los poderes en México, en un momento en el que las reformas propuestas por el Ejecutivo están generando divisiones significativas en el país.