El ex presidente Andrés Manuel López Obrador impulsó el programa “Mi Patria no se vende” , una iniciativa para recuperar el patrimonio cultural de México que fue sacado ilegalmente del país. Desde su inicio, se han logrado repatriar 14 mil piezas arqueológicas , incluyendo las más recientes 101 piezas devueltas por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Italia .
Enrique Tostado , director de Asuntos Jurídicos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), destacó durante la conferencia presidencial que México ha trabajado con países de todo el mundo mediante acciones legales y diplomáticas para recuperar su patrimonio. En esta labor participan instituciones como la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), la Secretaría de Cultura, la Fiscalía General de la República y el INAH.
Patrimonio invaluable
Aunque muchas de estas piezas tienen un valor comercial en el mercado negro, Tostado subrayó que su verdadero valor es cultural e histórico , ya que representan la esencia de la nación. “El camino que ha tomado este país es el de la recuperación de nuestra gran nación. Establecer un monto no caza con los propósitos del gobierno federal”, afirmó.
Novedades, entregas y retos
Entre las piezas más destacadas de la reciente devolución italiana se encuentra una figura religiosa del estado de Hidalgo. El INAH analiza cuál será el museo más adecuado para exhibirla. Además, la embajada de Estados Unidos en México entregó recientemente seis piezas robadas.
Uno de los mayores desafíos que enfrenta el país es la descontextualización del patrimonio . Tostado explicó que cuando una pieza sale de su entorno original, es complicado recuperar la información histórica y cultural que la rodea.
Esta iniciativa reafirma el compromiso de México con la protección y recuperación de su herencia cultural, mostrando al mundo la importancia de preservar la historia y las raíces de una nación.
