Alejandro Martínez Araiza, Secretario del SindicatoAlimenticio y del Comercio
Ciudad de México, abril de 2025. Desde el Sindicato Nacional Alimenticio y del Comercio, reconocemos que México se encuentra en una posición estratégica frente al nuevo contexto comercial internacional. Gracias al Tratado Entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), nuestro país mantendrá un trato preferencial, lo que significa que no pagará aranceles en muchos productos agroalimentarios que forman parte de este acuerdo.
Esto representa una ventaja competitiva muy importante frente a otras naciones que sí enfrentarán costos adicionales para ingresar al mercado estadounidense. En un entorno donde la demanda de productos alimenticios sigue creciendo, esta condición puede fortalecer la presencia de México en ese mercado y abrir oportunidades de crecimiento para las empresas del sector.
Sin embargo, ese crecimiento debe ir acompañado de protección y justicia para los trabajadores. Si bien México es hoy uno de los principales proveedores de alimentos frescos y procesados para Estados Unidos —como aguacates, tomates, carnes y bebidas—, en México se quebrantan sistemáticamente los derechos laborales de la mayoría de los trabajadores, dentro y fuera de la formalidad. Hay profundas deficiencias en las condiciones laborales del sector, especialmente en los bajos salarios, el mal trato, la injerencia patronal en la vida sindical y en el derecho a la libre asociación.
Además, el gobierno de Estados Unidos ha señalado que pondrá especial atención en que no existan prácticas de dumping laboral: es decir, que no se abaraten artificialmente los costos de producción afectando los derechos laborales,salarios justos o condiciones dignas. Esto representa una oportunidad para reforzar nuestro compromiso con una producción justa y competitiva de la mano del gobierno del presidente Trump.
No se puede sostener una industria fuerte solo con base en salarios bajos o condiciones frágiles. Como Sindicato, lo decimos con claridad: el crecimiento económico debe ir de la mano con el respeto a los derechos laborales. Es momento de consolidar un modelo donde los trabajadores tengan estabilidad, acceso a seguridad social, salarios dignos y participación real en los beneficios de la industria.
Cuidar el empleo y la economía familiar debe ser prioridad. Cada decisión comercial y cada incentivo a la inversión debe pasar también por el filtro del bienestar social. De nada sirve atraer más negocios si eso no se traduce en calidad de vida para quienes forman parte esencial de la cadena alimentaria: los trabajadores.
El T-MEC nos brinda una ventaja estratégica, pero también una responsabilidad compartida: gobiernos, empresas y sindicatos debemos garantizar que esa ventaja se construya con justicia laboral. Solo así, México podrá sostener su liderazgo agroalimentario sin sacrificar la dignidad de su gente.
Acerca del SNAC
El Sindicato Nacional Alimenticio y del Comercio se enorgullece en ser un co creador de historias de éxito en empresas como Grupo Bimbo, Grupo Mars, Mondelez,Arcor, Monte Xanic, Hershey, Comex, Alpezzi, Rich´s,Fisher and Paykel, Pastelería Ideal, entre otras.
Este sindicato se encuentra presente y activo bajo las normas actuales y el T-MEC en más de 465 centros de trabajo, en 210 ciudades de los 32 estados y ha formado parte de la historia de México durante 104 años.
