El Metro de Tokio, el sistema de transporte más antiguo de Asia, ha logrado un notable éxito en su debut en la bolsa de valores, marcando un hecho histórico en el transporte público japonés. Este miércoles, las acciones de Tokyo Metro se lanzaron al mercado y cerraron en 1,739 yenes, un 45% por encima del precio de salida de 1,200 yenes. Esta impresionante apertura representa un incremento superior al 50% en su valor, lo que permitió a la compañía recaudar alrededor de 2,300 millones de dólares (348.600 millones de yenes) para sus propietarios gubernamentales.
La oferta pública inicial (OPI) de Tokyo Metro se convierte en la más significativa en Japón desde 2018, y con este movimiento, el control gubernamental sobre la empresa se reducirá aproximadamente a la mitad, distribuyéndose equitativamente entre el Estado y la capital. La recaudación de fondos está destinada a amortizar bonos emitidos tras la devastación causada por el terremoto, tsunami y la crisis nuclear de 2011, que resultó en la trágica pérdida de 18,000 vidas.
Para atraer a los pequeños inversores, Tokyo Metro ha implementado incentivos atractivos. Aquellos que compren más de 200 acciones recibirán recompensas que incluyen entradas para el museo del metro, acceso a un campo de golf y suplementos gratuitos de tempura en los puestos de fideos de las estaciones, fomentando así el interés en la inversión en la compañía.
Desde su inauguración en 1927, el Metro de Tokio ha establecido un récord de eficiencia, transportando a 6.5 millones de pasajeros diariamente a través de sus nueve líneas, que se integran en una vasta red que conecta la capital con su extensa periferia. Este sistema de transporte es conocido por su limpieza y eficiencia, contrastando notablemente con la infraestructura envejecida de otras grandes ciudades como Londres, París, Nueva York e incluso la Ciudad de México, donde los operadores a menudo enfrentan fuertes deudas.
Los resultados financieros de Tokyo Metro son igualmente impresionantes. Para el año fiscal que finaliza en marzo de 2024, la empresa reportó un beneficio neto de 46,300 millones de yenes (305 millones de dólares), lo que representa un aumento del 67% en comparación con el año anterior. Para el presente año, Tokyo Metro tiene como objetivo alcanzar 52,300 millones de yenes en ganancias.
Según Hideaki Miyajima, profesor de comercio en la Universidad Waseda, la “baja volatilidad” de la firma la convierte en una opción segura para los pequeños inversores japoneses. Para el presidente de Tokyo Metro, Akiyoshi Yamamura, este éxito es un reflejo de la buena reputación de la empresa y una señal de que se cumplirán las expectativas de los inversionistas. Con este impulso, el Metro de Tokio no solo se consolida como un pilar del transporte público, sino también como una opción atractiva en el mercado financiero japonés.