La Ciudad de México cuenta con más de 43 mil cámaras de videovigilancia del C5, que se han convertido en una herramienta crucial para la resolución de delitos. Estas grabaciones son utilizadas como prueba plena ante autoridades judiciales y han sido determinantes en múltiples investigaciones. Uno de estos casos es el de Laura, quien fue asaltada en la alcaldía Gustavo A. Madero hace cinco meses. Gracias a una cámara cercana, el responsable fue identificado y posteriormente detenido.
El Centro de Comando, Control, Cómputo, Comunicaciones y Contacto Ciudadano de la Ciudad de México (C5), a cargo de Juan Manuel García, ha resaltado la importancia de estos videos para el combate al crimen. Las imágenes captadas por las cámaras se resguardan y se entregan a las autoridades correspondientes tras una denuncia. García destacó que cualquier víctima puede solicitar el resguardo del material si identifica que una cámara se encuentra en las inmediaciones del delito. Sin embargo, para acceder a la grabación, es necesario presentar una denuncia ante el Ministerio Público y proporcionar el número de identificación de la cámara.
“El video solo se entrega a las autoridades como el Ministerio Público o la autoridad judicial”, explicó García. Las grabaciones se eliminan después de un plazo que varía entre 7 y 30 días, por lo que es crucial realizar la solicitud rápidamente. En el caso de Laura, su denuncia fue presentada el mismo día del asalto, lo que permitió resguardar la grabación y ayudar en la identificación del sospechoso.
Además de los casos de robo y otros delitos, las grabaciones del C5 también juegan un papel fundamental en la búsqueda de personas desaparecidas. En estos casos, a los familiares se les permite revisar las grabaciones en las instalaciones del C5. “Es muy útil que un familiar vea las cámaras, porque puede identificar más rápido a la persona desaparecida”, explicó García. Para este procedimiento, los familiares deben solicitar la autorización a la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México.
Las cámaras del C5 operan con una eficacia del 98%, aunque pueden darse casos donde las cámaras estén en mantenimiento o fuera de servicio. No obstante, la videovigilancia sigue siendo una herramienta esencial en la lucha contra el crimen y en la resolución de casos complejos. El acceso a estas grabaciones es clave para garantizar la seguridad en la ciudad.
