El próximo 15 de abril, los maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), tienen previsto llevar a cabo un paro nacional de labores y una marcha en la Ciudad de México, luego de no llegar a un acuerdo con el presidente Andrés Manuel López Obrador sobre sus demandas, entre las que se incluye un aumento salarial y otras cuestiones relacionadas con sus condiciones laborales.
Esta decisión se anunció tras una reunión en Palacio Nacional, donde los líderes sindicales expresaron su descontento por la falta de avances en las negociaciones. Según la Sección 9 de la CNTE, hacía más de tres años que no se reunían con el presidente, a pesar de haber intensificado sus protestas en los últimos meses.
Entre las demandas de los maestros disidentes se encuentran la abrogación de la Ley del ISSSTE, la reinstalación de los maestros despedidos y la basificación de aquellos que tienen contratos temporales.
También la abrogación total de la Reforma Educativa de Enrique Peña Nieto, un aumento salarial acorde al decreto presidencial que establece un sueldo mínimo de 16 mil pesos mensuales para los docentes, la estabilidad laboral y la reinstalación de los maestros cesados durante administraciones anteriores, entre otros puntos.
Aunque celebraron que se reinstaló el diálogo con el gobierno, consideran que es necesario demostrar la unidad del magisterio en la lucha por sus derechos laborales.
El paro de labores afectará a millones de alumnos del nivel básico, ya que las clases serán suspendidas el 15 de abril. Además, se tiene prevista una marcha que partirá del Ángel de la Independencia hacia el Zócalo capitalino, con la participación de integrantes de las secciones de todos los estados.
La movilización del magisterio es una respuesta a la falta de avances en las negociaciones con el gobierno y busca presionar para que se atiendan sus demandas de manera efectiva.
