La Comisión Nacional del Agua (Conagua) anunció el inicio de operaciones de la planta potabilizadora Madín II, ubicada en Naucalpan, Estado de México. Este importante proyecto incrementará en 500 litros por segundo el suministro de agua potable para diversos municipios del Estado de México y varias alcaldías de la Ciudad de México.
El Organismo Cuenca Aguas del Valle de México (OCAVM), dirigido por Citlalli Elizabeth Peraza Camacho, puso en marcha la planta Madín II el pasado 8 de julio. Esta nueva infraestructura hídrica tiene una capacidad de producción de 500 litros por segundo, los cuales se distribuirán equitativamente: 50% al Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex) y 50% a la Comisión del Agua del Estado de México (CAEM). La planta operará únicamente durante la temporada de lluvias, aprovechando los volúmenes almacenados en la Presa Madín.
La entrada en operación de la planta Madín II significa un alivio significativo para las regiones beneficiadas. En la Ciudad de México, las alcaldías de Azcapotzalco, Gustavo A. Madero e Iztapalapa verán una mejora en el suministro de agua potable. Del mismo modo, en el Estado de México, los municipios de Naucalpan, Atizapán de Zaragoza y Tlalnepantla serán beneficiados con este incremento en la disponibilidad de agua.
Felipe Zataráin, subdirector de Agua Potable, Drenaje y Saneamiento de Conagua, destacó que, con las plantas potabilizadoras Madín I y Madín II, se pueden extraer hasta mil litros por segundo de la Presa Madín durante siete meses de la temporada de lluvias. Este volumen de extracción se reparte de manera equitativa entre la Ciudad de México y el Estado de México, asegurando un suministro constante y equilibrado para ambas entidades.
Implicaciones Económicas y Ambientales
El aumento en el suministro de agua potable no solo representa un beneficio directo para los habitantes de las regiones mencionadas, sino que también tiene implicaciones económicas y ambientales. Un suministro más confiable de agua potable reduce la necesidad de métodos alternativos y costosos de obtención de agua, al mismo tiempo que disminuye la presión sobre otros recursos hídricos.
Además, al operar únicamente durante la temporada de lluvias, la planta Madín II optimiza el uso de los recursos disponibles, asegurando que los volúmenes almacenados en la Presa Madín se utilicen de manera eficiente y sostenible.
