Al momento

“Los perros que solo reconocían las enaguas”, cuenta la historia de Luisa, Teresa, Maura y Tomasa

Posted on

La Secretaría de Cultura del Gobierno de México y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), a través de la Coordinación Nacional de Teatro, y la compañía Manzanitas Escena presentan Los perros que solo reconocían las enaguas, una puesta en escena que cuenta la historia de Luisa, Teresa, Maura y Tomasa, cuatro mujeres de la tercera edad que habitan Manzanitas Cieneguilla, Cardonal, un pueblo con apenas doce habitantes, ubicado en el estado de Hidalgo.

En el “pueblo de nombres inventados”, la identidad es tan maleable como necesaria. Es también un lugar frágil, consciente de su destino: Pa’ este punto, cuando ustedes sepan que este pueblo existe, quizá ya dejó de existir: Manzanitas, el pueblo que tiene el tiempo contado”, como dice parte del argumento de la obra que se presenta durante julio de 2025 en el Teatro Orientación Luisa Josefina Hernández.

La pieza es el resultado de un proceso comunitario y familiar. “Es un texto docuficcional que nace de prácticas comunitarias y recabación testimonial de mis tías. Fueron pláticas de comedor, convivencia durante al menos un año y un trabajo de escritorio”, explica su dramaturga y directora, Mayra Simón.

El mayor reto, reflexiona Simón, fue “no traicionar la verdad de las historias”, para no exagerar la tragedia y mantenerse lo más fiel posible a los relatos de las cuatro mujeres mayores; vidas marcadas por el tiempo, el trabajo y la memoria.

Las historias íntimas y poderosas son interpretadas por un elenco conformado por Edna Rodríguez, Sharim Padilla, Araceli Martínez y Fabiola Villalpando, quienes encarnan a las mujeres de Manzanitas con sensibilidad, humor y una profunda honestidad.

Sobre su experiencia, Fabiola Villalpando, quien interpreta a Maura, comparte: “Desde que leí la obra, dije ‘Yo quiero contar esto, quiero ser parte de esto’. Está llena de imágenes. Cada vez que la paso, descubro cosas nuevas. Hay palabras que me pegan desde otro lugar”.

La voz poética de Manzanitas

Entre recuerdos de infancias robadas, obediencias perpetuas y amores imposibles, la dramaturgia recoge con humor y lirismo la reflexión de las mujeres sobre el destino impuesto: “Cuando era niña, mamá decía que una mujer llegaba a la tierra para servir de tres formas: como rosa, como yunta o como estiércol. Bonita en el florero, útil para la siembra o deshecha pa’ que otras crezcan”.

Las historias se entretejen en un bucle involuntario de obediencia perpetua, infancias robadas, migraciones forzadas y fracturas amorosas; así, las conversaciones se vuelven un acto de resistencia íntima. “Una se cuida, se quita las plagas, se corta los frutos y vuelve a empezar. Una es tierra. Una es árbol. Una es manzana”.

Una invitación a cuidar la memoria

Los perros que solo reconocían las enaguas es un homenaje a las mujeres de Manzanitas Cieneguilla y un recordatorio de que el teatro preserva la memoria y construye comunidad. Manzanitas Escena invita al público a sumarse a un acto de cuidado: sostener la memoria antes de que desaparezca y pronunciar los nombres antes de que se pierdan.

Esa comunidad pronto desaparecerá y me parece muy hermoso que permanezca viva a través del teatro. La obra es un gesto de resistencia, dice Fabiola Villalpando.

Estrenada en 2020, la puesta en escena ha recorrido diferentes foros con el deseo de acercarse especialmente a públicos mayores. Fue seleccionada como parte de la 41 Muestra Nacional de Teatro, consolidándose como una apuesta honesta y conmovedora de la escena contemporánea.

La producción se realiza con el apoyo del estímulo fiscal EFIARTES.

Los perros que solo reconocían las enaguas se presenta durante julio de 2025 en el Teatro Orientación Luisa Josefina Hernández, con funciones los jueves y viernes a las 20:00 h, sábados a las 19:00 h y domingos a las 18:00 h.

Tendencia

Salir de la versión móvil