El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dio oficialmente el “banderazo” inicial al Fondo de Pensiones para el Bienestar. Este programa tiene como objetivo garantizar que los trabajadores que se jubilen puedan recibir el 100% de su último salario, especialmente aquellos adscritos al esquema de retiro de pensiones de 1997 y que percibían sueldos menores a 16,777 pesos.
Detalles del Programa
A partir de este lunes, 280 trabajadores jubilados serán los primeros beneficiarios de este nuevo esquema. La Secretaría de Hacienda informó que el Fondo de Pensiones para el Bienestar inicia con una bolsa de 44,894 millones de pesos, recaudada de las Afores inactivas y no reclamadas, además de aportaciones de la propia Secretaría y paraestatales militares.
En una ceremonia realizada en el Salón Tesorería de Palacio Nacional, López Obrador entregó los primeros pagos complementarios a un grupo de jubilados. Durante su discurso, el mandatario destacó los logros de su gobierno en la reducción de la pobreza y la desigualdad, y subrayó la importancia de continuar con la transformación del país.
“Se ha logrado reducir la pobreza en México y se ha logrado reducir la desigualdad. Ahora, el pueblo de manera acertada decidió que continúe la transformación”, indicó López Obrador.
Reforma de Pensiones
La secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde, enfatizó el cambio significativo que representa esta reforma de pensiones, pasando de un sistema de cuentas individuales a uno mixto en el que también participa el Gobierno federal. “Ahora hay un complemento solidario para garantizar que los trabajadores puedan jubilarse con el 100% de su último salario”, explicó Alcalde. Como ejemplo, mencionó que un pensionado que recibiría 6,000 pesos mensuales bajo el esquema anterior ahora obtendrá una pensión de 10,000 pesos mensuales gracias al aporte del Fondo de Pensiones para el Bienestar.
Héctor Santana, titular de la Unidad de Seguros y Pensiones de la Secretaría de Hacienda, detalló que el Fondo cuenta actualmente con 31,700 millones de pesos, pero en los próximos días se completará el total de 44,894 millones de pesos. De estos recursos, el 59% proviene de las Afores inactivas o no reclamadas, mientras que el resto se deriva de cuentas inactivas del Infonavit y de la extinta Financiera Rural.
Santana explicó que solo de las Afores se recibirán 24,238 millones de pesos de unas 2.2 millones de cuentas inactivas por más de 10 años. Los fondos se distribuirán de la siguiente manera:
- Un 22% proviene de la Afore Banorte XXI
- Un 16% de Sura
- Otro 16% de Citibanamex
El Fondo de Pensiones para el Bienestar será un fideicomiso público administrado por el Banco de México, que se encargará de complementar las pensiones para que sean equivalentes al último salario del trabajador, siempre que no se rebase el tope de 16,777 pesos al mes. Los recursos de Afores no reclamadas, el 75% de los remanentes netos del Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado, y el 25% de las utilidades netas de las paraestatales de las Fuerzas Armadas, así como donaciones y aportaciones de la Secretaría de Hacienda, alimentarán esta bolsa.
Supervisión y Transparencia
Omar Mejía, subgobernador del Banco de México, aseguró que el banco central vigilará estrictamente el fideicomiso y emitirá informes trimestrales sobre su manejo. “La transparencia y la correcta administración de estos recursos son fundamentales para garantizar la confianza de los beneficiarios y de la sociedad en general”, afirmó Mejía.
Beneficiarios y Primeros Pagos
En esta primera etapa, se beneficiará a 249 jubilados del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y a 31 jubilados del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE). El pago complementario inicial fue de poco más de un millón de pesos. Zoé Robledo, director del IMSS, explicó que los primeros beneficiarios recibirán un pago adicional promedio de 3,975 pesos, mientras que en el ISSSTE el complemento será de aproximadamente 3,000 pesos, elevando las jubilaciones a una media de 10,000 pesos mensuales.
Robledo dio ejemplos concretos durante la ceremonia: “Delfina Calderón, quien trabajó en el gobierno federal y la iniciativa privada, con un salario de 12,880 pesos mensuales, recibirá un complemento de 4,800 pesos, alcanzando una pensión total de 12,880 pesos. Raymundo Vallejo, extrabajador de la Ruta 100 y uno de los primeros conductores del Metrobús, tendrá un complemento de 7,449 pesos, sumando su pensión a 13,077 pesos mensuales”.
López Obrador criticó las reformas de pensiones realizadas durante los gobiernos de Ernesto Zedillo y Felipe Calderón, que afectaban negativamente a los trabajadores, permitiendo que recibieran solo el 30% de su último salario al jubilarse. “En el periodo neoliberal hicieron reformas contrarias al trabajador para que al jubilarse no recibiera su sueldo completo. Iban a recibir el 30% del último salario”, recordó el presidente.
La Secretaría de Hacienda estima que el Fondo de Pensiones para el Bienestar requerirá 130,000 millones de pesos para operar durante los próximos 10 años. El actual gobierno prevé aportar unos 60,000 millones de pesos de esta cantidad, demostrando su compromiso con la sostenibilidad del programa.
La reforma es vista como un avance significativo en la protección social y el bienestar de los trabajadores jubilados. Al garantizar pensiones equivalentes al último salario, se busca asegurar una vejez digna y reducir la desigualdad económica entre los jubilados.
El anuncio ha sido bien recibido por los jubilados y representantes de organizaciones de trabajadores. Mariana Herrera, representante del sindicato de trabajadores del IMSS, expresó su satisfacción: “Es un gran paso hacia la justicia social para los trabajadores que han dado su vida al servicio del país. Ahora pueden esperar una jubilación digna”.
