21 noviembre, 2024

El Gran Premio de Italia 2024 dejó un sabor agridulce para Sergio ‘Checo’ Pérez, quien terminó en la octava posición en el Autódromo Internacional de Monza. Este resultado encendió las alarmas en el equipo Red Bull, ya que el piloto mexicano destacó problemas significativos en su monoplaza, mientras su compañero Max Verstappen finalizó en la sexta posición, manteniendo el liderato en el Campeonato de Pilotos.

 

Pérez expresó su preocupación por la falta de balance en su auto, un problema que se hizo evidente durante la carrera. “El auto no tiene balance, en la curva rápida pierdo muchísimo tiempo”, comentó ‘Checo’ en una entrevista con Fox Sports. Además, mencionó que la rápida degradación de los neumáticos blandos y medios le impidió competir al máximo, dejando como única opción viable el uso del compuesto duro.

 

A pesar de estos desafíos, Pérez considera que la estrategia general fue correcta, aunque un stint demasiado corto en el segundo tramo de la carrera comprometió su posición. “Hemos hecho la estrategia correcta, pero ya no le pude pelear tanto a George [Russell] que venía en un mejor ritmo”, señaló el piloto.

 

 

La situación preocupa al equipo Red Bull, ya que las mejoras que han mostrado otros equipos como Ferrari y McLaren contrastan con el estancamiento del equipo austriaco. McLaren ya le pisa los talones a Red Bull en el Campeonato de Constructores, y un mal desempeño en la próxima carrera podría costarles el liderato.

 

Con la próxima semana libre de competencias, Pérez tiene claro que será crucial aprovechar este tiempo para trabajar intensamente en la fábrica de Red Bull. “Va a ser una semana muy importante en el equipo. Mañana estoy en la fábrica inmediatamente con todo el equipo, y serán unos días muy intensos para intentar encontrar las soluciones que estamos buscando”, afirmó Pérez, subrayando la necesidad de corregir los problemas antes del Gran Premio de Azerbaiyán.

 

Charles Leclerc, piloto de Ferrari, se alzó con la victoria en una carrera que fue clave para intensificar la batalla por los Campeonatos de Pilotos y Constructores.

 

Leclerc, quien ya había ganado en Monza en 2019, repitió la hazaña al dominar las 53 vueltas del circuito con una estrategia impecable que incluyó una sola detención en los pits. Este triunfo no solo reafirma su posición como uno de los contendientes principales, sino que también revitaliza las aspiraciones de Ferrari en la temporada.

 

El podio fue completado por los McLaren de Oscar Piastri y Lando Norris, quienes mostraron un rendimiento destacado, reafirmando que McLaren es una fuerza a tener en cuenta en lo que resta de la temporada. Este resultado también pone presión sobre los líderes del Campeonato de Constructores, donde McLaren se ha acercado peligrosamente a Red Bull, que ha mostrado señales de estancamiento en las últimas carreras.

 

Gran Premio de Italia ha dejado claro que nada está decidido aún. La próxima carrera en Azerbaiyán será crucial para definir el rumbo de los campeonatos, donde cada punto cuenta y los errores pueden ser costosos.