19 septiembre, 2024

 

El Jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Martí Batres Guadarrama, en  conferencia de prensa abordó uno de los temas más sensibles para la capital: el adeudo de agua potable por parte de grandes consumidores no domésticos. Durante su intervención, reveló que 25 usuarios no domésticos deben al Sistema de Aguas de la Ciudad de México (SACMEX) un total de 31 millones de pesos, una situación que ha llevado a la administración a tomar medidas drásticas para asegurar el cumplimiento de las obligaciones financieras de estos deudores.

 

 

El Jefe de Gobierno detalló que los 25 deudores identificados son principalmente negocios de giros comerciales, industriales y de servicios. Estas entidades han acumulado deudas que superan los 400 mil pesos cada una, con un caso particular que destaca por adeudar más de 6 millones de pesos al SACMEX. Estos adeudos corresponden a un período de entre cuatro y 30 bimestres sin pago, lo que ha generado una preocupación significativa en la administración capitalina.

 

“Estamos hablando de grandes consumidores de agua que, pese a tener la capacidad de pago, han dejado de cumplir con sus obligaciones durante varios años. Esta situación es insostenible y representa una falta de responsabilidad hacia el uso de un recurso vital en nuestra ciudad”, subrayó el Jefe de Gobierno.

 

Desde el 5 de agosto, SACMEX ha iniciado un proceso formal de notificación a los deudores. Se les ha enviado cartas de invitación al pago y apercibimientos en sus respectivos domicilios, con el objetivo de regularizar su situación. De los 26 deudores inicialmente identificados, 23 han recibido la notificación correspondiente, mientras que otros tres fueron notificados por otros medios; hasta el momento, solo uno de estos usuarios ha realizado el pago completo de su adeudo.

 

Martí Batres advirtió que, de no cumplirse con los pagos en los próximos días, se procederá a la suspensión del servicio de agua potable para estos usuarios. “Queremos evitar llegar a estas medidas, pero es necesario que entiendan la gravedad de la situación. No estamos hablando de pequeños consumidores; estos son negocios que deben asumir su responsabilidad”, afirmó.

 

 

El tema de los adeudos de agua no es solo una cuestión financiera, sino también una de justicia social y equidad en el acceso y uso de los recursos naturales de la ciudad. El Jefe de Gobierno hizo hincapié en que la falta de pago por parte de estos grandes consumidores afecta la capacidad del SACMEX para mantener y mejorar la infraestructura hídrica de la ciudad, lo que a su vez impacta negativamente en el servicio que se puede ofrecer a la población en general.

 

“Es inadmisible que mientras muchas familias en la Ciudad de México hacen un esfuerzo por pagar sus recibos de agua, algunos grandes consumidores simplemente ignoren sus obligaciones. Esta administración no permitirá que esto continúe”, señaló.

 

Además, el titular del Ejecutivo mencionó que, en caso de que los adeudos no se regularicen, se podrían explorar otras medidas legales para garantizar el cobro de estas deudas y entre las posibles acciones, se mencionó la posibilidad de hacer públicos los nombres de los deudores, algo que, según él, preferiría evitar si los pagos se realizan a tiempo.

 

Este anuncio se enmarca en un contexto más amplio de crisis hídrica en la Ciudad de México, donde la escasez de agua y la sobreexplotación de los mantos acuíferos han sido temas recurrentes en la agenda pública. El gobierno de la ciudad ha implementado diversas estrategias para mejorar la eficiencia en el uso del agua, desde la reparación de fugas hasta la promoción de sistemas de captación de agua pluvial.

 

El Jefe de Gobierno recordó que, además de las acciones punitivas, su administración ha estado trabajando en proyectos de infraestructura hídrica que buscan asegurar el suministro de agua a largo plazo para la ciudad; pero subrayó, que estos esfuerzos requieren de la cooperación de todos los actores involucrados, incluyendo a los grandes consumidores de agua.

 

“El problema del agua no se resolverá solo con inversiones públicas; necesitamos que todos los usuarios, especialmente los grandes consumidores, asuman su parte de responsabilidad. Solo así podremos asegurar que la Ciudad de México tenga un suministro de agua adecuado y sostenible en el futuro”, concluyó.

 

El Jefe de Gobierno ha dejado claro que la administración capitalina no está dispuesta a tolerar la falta de pago por parte de grandes consumidores de agua. Con una deuda acumulada de 31 millones de pesos, estos 25 usuarios no domésticos se encuentran en la mira de SACMEX, que está dispuesto a tomar medidas drásticas para asegurar el cumplimiento de las obligaciones.

 

El mensaje es claro: el uso responsable y equitativo del agua es una prioridad para la Ciudad de México, y quienes no cumplan con sus compromisos enfrentarán las consecuencias. La administración espera que, en los próximos días, los deudores restantes regularicen su situación para evitar acciones más severas, pero está preparada para actuar si es necesario.