6 noviembre, 2024

 

Este fin de semana comenzó la temporada 2024-2025 de la Liga Mexicana del Pacífico (LMP), dejando grandes emociones dentro como fuera del campo. Tres equipos lograron arrancar con el pie derecho en sus primeras series: Tomateros de Culiacán, Cañeros de Los Mochis y Venados de Mazatlán; sin embargo, el partido entre Naranjeros de Hermosillo y Yaquis de Obregón fue escenario de un suceso inesperado.

 

Los Tomateros de Culiacán ganaron el segundo juego inaugural en Guasave con un marcador de 7-4, apoyados por una sólida ofensiva que conectó 11 imparables. El lanzador Víctor Castañeda fue clave para que los guindas se llevaran la victoria en este emocionante inicio de temporada.

 

Por otro lado, los Cañeros de Los Mochis también comenzaron con el pie derecho, logrando una victoria dramática ante los Mayos de Navojoa. Un cuadrangular de Roel Santos en la novena entrada sentenció el encuentro a favor de los Cañeros, sellando un 3-2 en un final lleno de tensión.

 

Los Venados de Mazatlán también se lucieron en casa. En el Estadio Teodoro Mariscal, derrotaron 3-1 a los Charros de Jalisco, completando un inicio de temporada perfecto para estos tres equipos.

 

 

Sin embargo, lo más sorprendente del fin de semana ocurrió en Obregón, cuando dos paracaidistas irrumpieron en el campo durante el partido entre Yaquis y Naranjeros. El primer paracaidista descendió en plena tercera entrada, dejando asombrados a los jugadores y aficionados. Se trataba de una mujer que, al tocar tierra, se quitó el uniforme y corrió hacia una salida. Minutos después, una segunda paracaidista aterrizó de forma similar, despojándose también de su equipo de vuelo antes de salir rápidamente del campo. Ambos incidentes dejaron a los presentes boquiabiertos y provocaron revuelo en redes sociales.

 

Este peculiar suceso no opacó el empate en la serie entre Naranjeros y Yaquis, que quedó 1-1. Mientras tanto, los Sultanes de Monterrey y Águilas de Mexicali también dividieron triunfos en su serie, dejando todo listo para la definición en casa de los regiomontanos.