Desde el corazón de Xochimilco, se llevó a cabo la novena entrega de créditos del Fondo para el Desarrollo Social (FONDESO) como apoyo a las micro, pequeñas y medianas empresas (MiPyMEs) de la capital. Con una audiencia compuesta por emprendedores ansiosos y funcionarios dedicados, el ambiente estaba cargado de expectativa y optimismo.
El Jefe de Gobierno de la Ciudad, Martí Batres inició su discurso evocando una cita de León Tolstói que refleja la misión del gobierno: procurar la justicia y el bienestar de la población. Expresó que todas las acciones gubernamentales están diseñadas para mejorar directamente la vida de los ciudadanos, subrayando programas existentes que benefician desde estudiantes hasta adultos mayores.
Batres criticó las políticas neoliberales anteriores que privilegiaban el apoyo económico a las grandes corporaciones y explicó que su administración ha invertido la dinámica, proporcionando apoyo directo a la base de la pirámide económica. Afirmó que esta estrategia no solo es más justa, sino también más efectiva para estimular la economía local.
Además de los créditos, Batres anunció medidas para proteger los barrios y pueblos históricos de la Ciudad de México contra el desarrollo urbano invasivo que podría expulsar a los residentes tradicionales. Estas medidas están diseñadas para preservar el patrimonio cultural y asegurar que el desarrollo económico no desplace a las comunidades establecidas.
El evento no solo se centró en la entrega de créditos, sino que también sirvió como plataforma para reafirmar el compromiso del gobierno local con el bienestar económico de sus ciudadanos. Citando al presidente Andrés Manuel López Obrador, el secretario de Desarrollo Económico, Fadlala Akabani, recordó la máxima de que “un Estado que no procura la justicia no es más que una banda de malhechores”, subrayando la misión del gobierno de actuar siempre en favor del bienestar común.
Durante el evento, se entregaron créditos a 3,625 beneficiarios, con una mayoría significativa de mujeres, destacando el enfoque del gobierno en empoderar a las emprendedoras de la ciudad. Estos créditos están diseñados para impulsar una variedad de negocios, desde tiendas de regalos hasta academias de inglés y talleres de reparación.
Los números hablan por sí solos: desde el inicio de la administración actual hasta la fecha, se han otorgado 272,000 créditos, superando ampliamente los esfuerzos de administraciones anteriores. Esto refleja un cambio significativo en la política económica, priorizando el apoyo directo a los estratos más bajos de la economía sobre los grandes conglomerados empresariales.
Uno de los cambios más impactantes bajo la actual administración ha sido la reducción de las tasas de interés de los créditos de FONDESO. Mientras que en el pasado las tasas podían ascender hasta el 24%, ahora se han ajustado a un 6%, e incluso al 0% en ciertos casos, facilitando así la carga financiera para los emprendedores y permitiendo una mayor reinversión en sus negocios.
Además de la ayuda financiera, el programa FONDESO ha puesto un énfasis considerable en la capacitación de los beneficiarios. Con casi 800,000 personas capacitadas en los últimos seis años, el programa no solo busca proporcionar los medios económicos para emprender, sino también asegurarse de que los emprendedores tengan las herramientas y conocimientos necesarios para prosperar.
Aparte de los aspectos económicos, el evento también tocó temas de desarrollo urbano, especialmente la protección de los barrios y pueblos tradicionales contra el desarrollo desmedido. Este enfoque busca mantener la identidad cultural de distritos como Xochimilco, protegiendo su estructura histórica y social de las presiones del desarrollo moderno.
Al cerrar el evento, los organizadores y participantes se mostraron optimistas sobre el impacto futuro de estos créditos. Con un gobierno comprometido con el desarrollo desde la base, y una comunidad empresarial cada vez más robusta y diversificada, el futuro económico de la Ciudad de México se perfila no solo más próspero, sino también más inclusivo.
Así mientras el sol se pone sobre los canales de Xochimilco, no solo concluye un día de celebración y promesas, sino que también amanece una era de oportunidades renovadas para los emprendedores de la Ciudad de México.
