A partir de este mes, las compras en plataformas como Shein, Temu, AliExpress y otros gigantes del comercio electrónico asiático enfrentarán un nuevo escenario fiscal. La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) informó que el impuesto de importación para estas plataformas aumentará de un 19 % a un 33.5 %, como parte de un nuevo ajuste tributario a las importaciones digitales.
La decisión, anunciada a través del Diario Oficial de la Federación, ha generado reacciones divididas entre consumidores, empresarios y economistas.
Un cambio que impacta directo en el bolsillo digital
El aumento de impuestos responde a una estrategia de contención frente al crecimiento acelerado del e-commerce asiático, que ha desplazado una parte importante del consumo nacional hacia marcas extranjeras de bajo costo. Según datos del SAT, plataformas como Shein y Temu concentran más del 38 % del comercio en línea de moda y tecnología en México, muchas veces evadiendo aranceles mediante subvaluación de paquetes o triangulación logística.
La nueva tarifa de 33.5 % se aplicará a productos cuyo valor declarado esté por debajo del límite fiscal de importación, es decir, incluso en envíos pequeños o paquetes personales, que antes gozaban de exenciones parciales.
Textileros y mipymes respaldan el ajuste
Diversas cámaras empresariales del sector textil y confección han expresado su respaldo a la medida, argumentando que permitirá “nivelar el terreno” frente a una competencia que por años ha operado sin las mismas reglas. La Canaintex y el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) celebraron el cambio, asegurando que ayudará a recuperar empleo y ventas en un sector afectado por la informalidad digital.
Usuarios anticipan migración a intermediarios o tiendas clandestinas
En contraste, especialistas advierten que la medida no frenará el consumo, sino que lo empujará hacia canales informales, como la reventa en redes sociales, los grupos de importación por mayoreo o tiendas clandestinas. Organismos como México, ¿Cómo Vamos? alertaron que el nuevo impuesto puede castigar especialmente a jóvenes, estudiantes y población de bajos ingresos que utilizan plataformas asiáticas como alternativa económica.
El aumento de impuestos a plataformas extranjeras representa un intento del gobierno por reducir la evasión fiscal y proteger la industria local, pero también enfrenta el desafío de no convertirse en un detonante de más informalidad digital. En medio de una economía presionada por la inflación y la volatilidad del tipo de cambio, cualquier peso adicional en el carrito digital puede reconfigurar los hábitos de consumo de millones de personas.

