2 julio, 2024

El piloto mexicano de Fórmula 1, Sergio “Checo” Pérez, ha recibido una multa de 25 mil euros tras intentar continuar la carrera en el Gran Premio de Canadá con su monoplaza dañado. La Federación Internacional del Automóvil (FIA) detectó la maniobra y decidió imponer una sanción tanto económica como deportiva al corredor de Red Bull Racing.

 

El Gran Premio de Canadá no fue favorable para Checo Pérez, quien inició en la posición 16 y enfrentó la difícil tarea de remontar posiciones, sin embargo, la situación empeoró cuando sufrió un accidente, perdiendo el control de su vehículo en una curva y chocando contra los muros de contención. A pesar del impacto, Pérez intentó llevar su auto dañado a boxes, acción que llevó a la FIA a sancionarlo.

 

Según el comunicado oficial de la FIA, Pérez condujo el resto de la vuelta con el alerón dañado, lo que podría haber provocado la salida de un Safety Car. Como resultado, la sanción incluye una multa de 25 mil euros y una penalización de tres posiciones en la parrilla de salida del próximo Gran Premio.

 

El accidente en Canadá representa el segundo abandono de Pérez en la temporada actual. El próximo desafío para el piloto mexicano será el Gran Premio de España, que se celebrará en el Circuito de Barcelona el domingo 23 de junio. Debido a la penalización, Pérez saldrá tres posiciones detrás de su puesto de clasificación.

 

La FIA justificó la sanción tras revisar las comunicaciones por radio y las imágenes del incidente. En el informe se destacó que Pérez continuó en la pista con su coche significativamente dañado, perdiendo varias piezas de fibra de carbono en el proceso. Red Bull Racing confirmó que se le había indicado al piloto que regresara a boxes para evitar una sanción de coche de seguridad.

 

El accidente ocurrió en la vuelta 53 mientras Pérez intentaba avanzar desde el puesto 13. La pérdida de control del monoplaza se debió a las condiciones húmedas de la pista, lo que resultó en un deslizamiento y posterior colisión con el muro de contención. A pesar de sus esfuerzos por continuar, los daños obligaron a Pérez a retirarse de la carrera y dirigirse a la zona de pits.

 

Esta sanción y multa representan un desafío adicional para Checo Pérez, quien deberá demostrar su capacidad de recuperación en el próximo Gran Premio de España.