19 septiembre, 2024

En un contexto de creciente violencia en Chiapas, las familias salen huyendo y se desplazan hacia Guatemala por temor a que sus hijos sean secuestrados por bandas criminales que se disputan la región. La situación fue confirmada por el presidente Andrés Manuel López Obrador y la secretaria de Relaciones Exteriores, Alicia Bárcena, quienes revelaron detalles alarmantes sobre el desplazamiento de estas familias.

 

El 23 de julio, alrededor de 400 personas cruzaron la frontera hacia el municipio de Cuilco en Guatemala para protegerse de los enfrentamientos entre bandas criminales en Chiapas. Alicia Bárcena explicó durante una reunión de seguridad en Palacio Nacional, que los cónsules mexicanos en Guatemala han documentado que las familias prefieren quedarse cerca de sus comunidades en Chiapas para mantener sus propiedades y medios de sustento.

 

“Detectaron lo siguiente: la mayor parte de la población se dedica a la siembra del maíz y vende su producto en Comalapa. Los nacionales mexicanos cruzan por los constantes enfrentamientos entre, aparentemente, dos bandas criminales y han comenzado a reclutar jóvenes, sobre todo hombres jóvenes,” detalló Bárcena.

 

Los testimonios recabados por los cónsules reflejan el temor de las familias a regresar a sus hogares debido a la violencia y el riesgo de secuestro. “Nosotros les ofrecimos trasladarlos a Tapachula al albergue Siglo XXI, pero muchos prefieren quedarse cerca de sus comunidades,” explicó Bárcena. Añadió que 61 personas han retornado voluntariamente a sus hogares, mientras que otras prefieren ir y venir según la situación de seguridad.

 

El presidente López Obrador enfatizó que, aunque el país se encuentra en paz, se enfrentan hechos delictivos específicos que afectan regiones como Chiapas. “En el caso de Chiapas, una de las cosas que nos importan mucho es que están queriendo hacer una especie de leva, de enganche de jóvenes para las bandas,” dijo López Obrador. Afirmó que su gobierno está ofreciendo opciones de estudio y becas para los jóvenes, con el fin de alejarlos de las influencias delictivas.

 

Durante la inauguración del puente La Concordia, el presidente hizo un llamado a los pobladores del municipio para “hacer honor a su nombre” y trabajar por la justicia y la paz en la región. “Nada más decirles que estoy pendiente siempre de La Concordia, no me ha gustado lo que ha estado pasando últimamente. Ya estamos interviniendo,” expresó López Obrador.

 

Ante la violencia en Chiapas, los gobiernos de México y Guatemala acordaron realizar acciones conjuntas de asistencia humanitaria y seguridad. Durante una reunión entre los cancilleres de ambos países y otras autoridades, se decidió implementar operaciones simultáneas en la frontera y mantener mecanismos de comunicación permanentes. Además, se convocó a una reunión de alto nivel del Grupo de Alto Nivel de Seguridad México-Guatemala (Ganseg) a finales de agosto.

 

La Secretaría de Gobernación de México también impulsará un plan integral de atención para los habitantes de Amatenango de la Frontera, ofreciendo programas sociales, atención a la salud y un tianguis del bienestar con apoyos para las comunidades afectadas. Ambos países reafirmaron su compromiso de cooperación y coordinación con instancias multilaterales.

 

La violencia en Chiapas ha obligado a las familias a tomar decisiones drásticas para proteger a sus hijos. Las bandas criminales que operan en la región no solo se enfrentan entre sí, sino que también buscan reclutar a jóvenes, exacerbando el temor de la población. Esta situación ha llevado a las autoridades a reconocer el problema y a implementar medidas de emergencia para salvaguardar a los habitantes.

 

Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Seguridad, destacó la inédita participación de la prensa en la reunión de seguridad. “Hoy, de manera inédita, periodistas ingresaron al Gabinete de Seguridad, encabezado por el Presidente. Siempre es un gusto ver a los reporteros que se levantan temprano para mantener informado al pueblo de México,” escribió.

 

Por su parte, Claudia Sheinbaum, virtual presidenta electa, destacó durante la inauguración del puente La Concordia que estas obras representan justicia social y erradicación del racismo y clasismo. “Obras como el puente La Concordia significan erradicar el racismo y clasismo en el estado y todo el país,” afirmó Sheinbaum.

 

La situación en Chiapas es un reflejo de los desafíos que enfrenta México en términos de seguridad y protección de sus ciudadanos. Las acciones conjuntas entre México y Guatemala, junto con las medidas de asistencia y seguridad implementadas por el gobierno mexicano, buscan mitigar los efectos de la violencia y proporcionar un entorno más seguro para las familias desplazadas. La cooperación internacional y el compromiso de las autoridades son esenciales para abordar esta crisis y garantizar un futuro mejor para las comunidades afectadas.