19 septiembre, 2024

En el Estado de México, las autoridades han emitido una alerta ante los riesgos asociados con el uso de videojuegos por parte de niños y adolescentes. La titular de la policía Cibernética de la Secretaría de Seguridad del Estado de México (SSEM), Azucena Álvarez Alvarado, destacó la vulnerabilidad de los menores que juegan sin supervisión, especialmente durante las vacaciones, cuando el uso de dispositivos electrónicos se incrementa.

 

Durante los periodos vacacionales, el riesgo de que los menores se vean expuestos a prácticas peligrosas como el grooming se duplica. Esta práctica consiste en que un adulto se hace pasar por un menor en internet para establecer una relación de confianza con niños y adolescentes, con la intención de manipularlos emocionalmente y, eventualmente, acosarlos o extorsionarlos con fines sexuales.

 

Álvarez Alvarado señaló que los videojuegos como Roblox y FreeFire son particularmente peligrosos, ya que muchos niños los utilizan sin cumplir con la edad mínima requerida y sin la debida supervisión de sus padres. En el afán de mantener entretenidos a los niños durante las vacaciones, los padres permiten el uso indiscriminado de estos juegos, sin conocer las medidas de seguridad necesarias para protegerlos.

 

El auge de plataformas como TikTok durante la pandemia ha exacerbado este problema. “Cuando todos están en casa y ambos padres trabajan, el uso de plataformas sin supervisión aumenta significativamente, incrementando así los riesgos”, afirmó Álvarez Alvarado. Además, redes sociales populares como Instagram y Facebook también representan un riesgo elevado de bullying, acoso y exposición de los menores.

 

 

En lo que va del año, la policía cibernética ha registrado numerosos incidentes: 33 reportes por ciberbullying, 850 por acoso cibernético, 115 por suplantación de identidad, 63 por acoso a menores, 16 amenazas a menores, cinco casos de sexting, cuatro de sexting en menores de edad, tres fraudes a menores, dos menores desaparecidos, una denuncia de trata y otra por corrupción de menores.

 

El grooming a través de juegos como Roblox y FreeFire es particularmente preocupante. Los delincuentes contactan a los menores dentro del juego, obteniendo información personal como números telefónicos para continuar la comunicación por otras vías como WhatsApp. Esta situación puede llevar al intercambio de imágenes íntimas del menor, que luego son utilizadas para extorsionarlos, amenazando con hacer públicas las imágenes o incluso con dañar a sus familiares si denuncian.

 

Para mitigar estos riesgos, Álvarez Alvarado recomendó el uso de controles parentales. Existen programas que permiten a los padres monitorear y restringir el acceso de sus hijos a ciertas páginas y aplicaciones. Estos programas, que pueden ser gratuitos, enlazan el dispositivo del niño con el de los padres, permitiéndoles controlar el tiempo de uso y bloquear contenido inapropiado a distancia.

 

La supervisión activa y el conocimiento de las herramientas de control parental son esenciales para proteger a los menores en el entorno digital.