La Corte Suprema de Estados Unidos aceptó escuchar el caso presentado por México contra el fabricante de armas Smith & Wesson y el mayorista de armas Interstate Arms. México acusa a estas empresas de facilitar el tráfico ilegal de armas a los cárteles de la droga en el país, lo que ha generado una crisis de violencia armada. La demanda fue originalmente desestimada, pero un tribunal de apelaciones permitió que siguiera adelante, argumentando que las empresas podrían haber contribuido deliberadamente a este tráfico.
México presentó esta demanda en 2021, argumentando que los fabricantes de armas han diseñado y comercializado sus productos de manera que los hagan atractivos para los cárteles. Según México, estas compañías son responsables de la violencia armada que ha provocado la muerte de miles de personas en el país. La demanda busca una compensación económica significativa y que las empresas implementen medidas para evitar que sus productos caigan en manos de criminales.
Las empresas, por su parte, argumentan que están protegidas por la Ley de Protección del Comercio Legal de Armas, aprobada en 2005, que protege a los fabricantes de armas de ser responsables por los delitos cometidos con sus productos. El caso se debatirá en la Corte Suprema durante su mandato de nueve meses.
